/ lunes 27 de julio de 2020

Se cuidó la democracia

“Es hora de recuperar el diálogo eficaz como el instrumento privilegiado de la política al servicio del pueblo. Es hora pues, de los verdaderos demócratas”

Carlos Abascal Carranza


El miércoles pasado concluyó con éxito en la Cámara de Diputados el proceso de sustitución de 4 de las once consejeras y consejeros electorales que conforman el Instituto Nacional Electoral.

A propuesta de Acción Nacional, desde el inicio se acordó que el proceso se realizara completo en Parlamento Abierto, cuidando que todas las etapas se llevaran a cabo con la mayor transparencia posible y así, la selección de los 20 finalistas se realizó de forma intachable.

En la construcción del proceso se cumplió con los cuatro pilares necesarios: con una convocatoria amplia a la que asistieron alrededor de 390 personas, con un Comité Técnico que se condujo en apego a la Constitución y a las normas adicionales, y con la presentación de cuatro quintetas con 20 nombres; además no quedaron litigios o impugnaciones pendientes.

Las ocho bancadas en San Lázaro, es decir Morena, PAN, PRI, MC, PT, PVEM, PES y PRD alcanzamos un consenso absoluto, eligiendo a los mejores perfiles para fortalecer a México y darle certidumbre a la autoridad electoral.

Fue un trabajo ejemplar del Comité Técnico de Evaluación y hago un reconocimiento público a Diego Valadez, Ana Laura Magaloni, Blanca Heredia, José Roldán, Silvia Giorguli, Sara Lovera e incluso a John Ackerman, que en el sesgo de su prejuicio nos demostró a todos lo que no se debe de hacer. La mejor prueba del buen trabajo del Comité es que cada una de las propuestas que integraron las quintetas cumplió con los cuatro atributos necesarios: honestidad, capacidad profesional, independencia y carácter.

A las nuevas consejeras y consejeros: Norma Irene de la Cruz, Carla Astrid Humphrey, José Martín Fernando Faz y Uuc-Kib Espadas les deseo el mayor de los éxitos. En sus manos está depositado el futuro de millones de mexicanos que confían en las instituciones y encuentran en la democracia el antídoto a cualquier abuso y a cualquier tentación.

Durante una gran época la democracia en México sufrió dos grandes cánceres: el abstencionismo y los fraudes. Se aprendió del pasado y hoy es un buen día para la democracia, porque frente a los agoreros del fracaso se apostó por el futuro, se alcanzó un consenso y se cuidó al Instituto Nacional Electoral, para que siga siendo ejemplo mundial de resultados y de confianza electoral.


@JCRomeroHicks

“Es hora de recuperar el diálogo eficaz como el instrumento privilegiado de la política al servicio del pueblo. Es hora pues, de los verdaderos demócratas”

Carlos Abascal Carranza


El miércoles pasado concluyó con éxito en la Cámara de Diputados el proceso de sustitución de 4 de las once consejeras y consejeros electorales que conforman el Instituto Nacional Electoral.

A propuesta de Acción Nacional, desde el inicio se acordó que el proceso se realizara completo en Parlamento Abierto, cuidando que todas las etapas se llevaran a cabo con la mayor transparencia posible y así, la selección de los 20 finalistas se realizó de forma intachable.

En la construcción del proceso se cumplió con los cuatro pilares necesarios: con una convocatoria amplia a la que asistieron alrededor de 390 personas, con un Comité Técnico que se condujo en apego a la Constitución y a las normas adicionales, y con la presentación de cuatro quintetas con 20 nombres; además no quedaron litigios o impugnaciones pendientes.

Las ocho bancadas en San Lázaro, es decir Morena, PAN, PRI, MC, PT, PVEM, PES y PRD alcanzamos un consenso absoluto, eligiendo a los mejores perfiles para fortalecer a México y darle certidumbre a la autoridad electoral.

Fue un trabajo ejemplar del Comité Técnico de Evaluación y hago un reconocimiento público a Diego Valadez, Ana Laura Magaloni, Blanca Heredia, José Roldán, Silvia Giorguli, Sara Lovera e incluso a John Ackerman, que en el sesgo de su prejuicio nos demostró a todos lo que no se debe de hacer. La mejor prueba del buen trabajo del Comité es que cada una de las propuestas que integraron las quintetas cumplió con los cuatro atributos necesarios: honestidad, capacidad profesional, independencia y carácter.

A las nuevas consejeras y consejeros: Norma Irene de la Cruz, Carla Astrid Humphrey, José Martín Fernando Faz y Uuc-Kib Espadas les deseo el mayor de los éxitos. En sus manos está depositado el futuro de millones de mexicanos que confían en las instituciones y encuentran en la democracia el antídoto a cualquier abuso y a cualquier tentación.

Durante una gran época la democracia en México sufrió dos grandes cánceres: el abstencionismo y los fraudes. Se aprendió del pasado y hoy es un buen día para la democracia, porque frente a los agoreros del fracaso se apostó por el futuro, se alcanzó un consenso y se cuidó al Instituto Nacional Electoral, para que siga siendo ejemplo mundial de resultados y de confianza electoral.


@JCRomeroHicks