/ domingo 20 de octubre de 2019

Seguridad de miedo

LA MEJOR SEGURIDAD SE ENCUENTRA EN EL MIEDO.


WILLIAM SHAKESPEARE.


Gabriela Mora Guillén.

En medio de un vacío informativo, las horas pasaron y cerca de la media noche del jueves el Secretario de Seguridad, Alfonso Durazo confirmó la información que inicialmente fueron rumores: el hijo de Joaquín El Chapo Guzmán, Ovidio Guzmán López, que había sido detenido al medio día en Culiacán, había sido liberado por las autoridades, luego de un operativo francamente precipitado según lo reconoció el Secretario de la Defensa Nacional (Sedena), Luis Cresencio Sandoval, en conferencia de prensa el viernes por la mañana tras la reunión del Gabinete de Seguridad.

Al respecto, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que la decisión de liberar a Ovidio Guzmán la tomó el gabinete de seguridad de manera colegiada y él avaló esa determinación: “La decisión de liberar al narcotraficante se tomó para evitar el derramamiento de sangre en Culiacán… No puede valer más la captura de un delincuente que las vidas de las personas. La decisión la tomó el gabinete de seguridad, de manera conjunta, colegiada, de los secretarios de la defensa, la Marina, y de seguridad pública, yo respaldé esa postura por qué considero que lo más importante es la protección de las personas. Lo más importante es que no haya muertos. Lo más importante es la paz “, sentenció el presidente.

Además, López Obrador afirmó que su administración no cambiará su estrategia de evitar la confrontación directa con los carteles del crimen organizado y reiteró que la decisión que se tomó fue la adecuada, insistiendo en que no hay detención de algún delincuente que sea más importante que la vida de la población; el episodio del jueves, dijo, no debilita a su gobierno ni fortalece a los carteles del crimen organizado que se vieron involucrados en los hechos de Culiacán: “Acerca de si se fortalece, si se demostró debilidad del Estado, eso es más que nada es una conjetura de los expertos, sobre todo de nuestros adversarios”.

Honestamente, si es que con la actual administración se pudiera hablar de esta manera, hay una enorme diferencia entre buscar la pacificación y darse a la rendición. No es lo mismo intentar establecer políticas para reducir enfrentamientos violentos que someterse a la voluntad de grupos criminales.

Derivado de una emboscada contra policías municipales, el pasado lunes 13 murieron 14 policías en el Municipio de Aguililla, Michoacán. El martes, un enfrentamiento a balazos entre civiles armados y efectivos del Ejército dejó al menos 15 muertos, entre ellos un militar, en la comunidad de Tepochica, del municipio de Iguala, Guerrero… “Acerca de si se fortalece, si se demostró debilidad del Estado, eso es más que nada es una conjetura de los expertos, sobre todo de nuestros adversarios”, dice Andrés López…

Las decisiones tomadas por parte de las autoridades lejos de tender a la pacificación que pretende el presidente, fortalecen a los grupos criminales y abonan a la violencia; de los hechos ocurridos durante la semana se concluye la imposibilidad del Estado para establecer una política de pacificación en las condiciones que imperan en el País.

Está visto que la estrategia de seguridad tendiente a la pacificación, los regaños de padres y abuelos, los abrazos no balazos, no funcionan; lejos de ello, los grupos criminales perfectamente organizados han visto en ello una forma de rendición del Estado ante el evidente incremento de la violencia y la inseguridad.

Es por ello que la presión de Estados Unidos respecto al narcotráfico es cada vez mayor dada la influencia del tema de drogas es clave para la sociedad y en la política estadunidense… habrá que ver la reacción estadunidense ante los hecho ocurridos en Sinaloa y la liberación de Ovidio Guzmán.

Ante los hechos, particularmente sobre lo ocurrido en Sinaloa, es evidente que, ante la reacción de la delincuencia organizada ante la detención de “uno de los suyos”, la fuga de 50 reos del penal estatal, la confrontación y violencia con las autoridades y la liberación del capo detenido, pese a lo que diga el Pejidente y todo su equipo de seguridad, URGE cambiar en la estrategia de seguridad. Los abrazos con y sin balazos, está visto que no funcionan: “Acerca de si se fortalece, si se demostró debilidad del Estado, eso es más que nada es una conjetura de los expertos, sobre todo de nuestros adversarios”… No es así señor López, ya basta!!!

gamogui@hotmail.com


LA MEJOR SEGURIDAD SE ENCUENTRA EN EL MIEDO.


WILLIAM SHAKESPEARE.


Gabriela Mora Guillén.

En medio de un vacío informativo, las horas pasaron y cerca de la media noche del jueves el Secretario de Seguridad, Alfonso Durazo confirmó la información que inicialmente fueron rumores: el hijo de Joaquín El Chapo Guzmán, Ovidio Guzmán López, que había sido detenido al medio día en Culiacán, había sido liberado por las autoridades, luego de un operativo francamente precipitado según lo reconoció el Secretario de la Defensa Nacional (Sedena), Luis Cresencio Sandoval, en conferencia de prensa el viernes por la mañana tras la reunión del Gabinete de Seguridad.

Al respecto, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que la decisión de liberar a Ovidio Guzmán la tomó el gabinete de seguridad de manera colegiada y él avaló esa determinación: “La decisión de liberar al narcotraficante se tomó para evitar el derramamiento de sangre en Culiacán… No puede valer más la captura de un delincuente que las vidas de las personas. La decisión la tomó el gabinete de seguridad, de manera conjunta, colegiada, de los secretarios de la defensa, la Marina, y de seguridad pública, yo respaldé esa postura por qué considero que lo más importante es la protección de las personas. Lo más importante es que no haya muertos. Lo más importante es la paz “, sentenció el presidente.

Además, López Obrador afirmó que su administración no cambiará su estrategia de evitar la confrontación directa con los carteles del crimen organizado y reiteró que la decisión que se tomó fue la adecuada, insistiendo en que no hay detención de algún delincuente que sea más importante que la vida de la población; el episodio del jueves, dijo, no debilita a su gobierno ni fortalece a los carteles del crimen organizado que se vieron involucrados en los hechos de Culiacán: “Acerca de si se fortalece, si se demostró debilidad del Estado, eso es más que nada es una conjetura de los expertos, sobre todo de nuestros adversarios”.

Honestamente, si es que con la actual administración se pudiera hablar de esta manera, hay una enorme diferencia entre buscar la pacificación y darse a la rendición. No es lo mismo intentar establecer políticas para reducir enfrentamientos violentos que someterse a la voluntad de grupos criminales.

Derivado de una emboscada contra policías municipales, el pasado lunes 13 murieron 14 policías en el Municipio de Aguililla, Michoacán. El martes, un enfrentamiento a balazos entre civiles armados y efectivos del Ejército dejó al menos 15 muertos, entre ellos un militar, en la comunidad de Tepochica, del municipio de Iguala, Guerrero… “Acerca de si se fortalece, si se demostró debilidad del Estado, eso es más que nada es una conjetura de los expertos, sobre todo de nuestros adversarios”, dice Andrés López…

Las decisiones tomadas por parte de las autoridades lejos de tender a la pacificación que pretende el presidente, fortalecen a los grupos criminales y abonan a la violencia; de los hechos ocurridos durante la semana se concluye la imposibilidad del Estado para establecer una política de pacificación en las condiciones que imperan en el País.

Está visto que la estrategia de seguridad tendiente a la pacificación, los regaños de padres y abuelos, los abrazos no balazos, no funcionan; lejos de ello, los grupos criminales perfectamente organizados han visto en ello una forma de rendición del Estado ante el evidente incremento de la violencia y la inseguridad.

Es por ello que la presión de Estados Unidos respecto al narcotráfico es cada vez mayor dada la influencia del tema de drogas es clave para la sociedad y en la política estadunidense… habrá que ver la reacción estadunidense ante los hecho ocurridos en Sinaloa y la liberación de Ovidio Guzmán.

Ante los hechos, particularmente sobre lo ocurrido en Sinaloa, es evidente que, ante la reacción de la delincuencia organizada ante la detención de “uno de los suyos”, la fuga de 50 reos del penal estatal, la confrontación y violencia con las autoridades y la liberación del capo detenido, pese a lo que diga el Pejidente y todo su equipo de seguridad, URGE cambiar en la estrategia de seguridad. Los abrazos con y sin balazos, está visto que no funcionan: “Acerca de si se fortalece, si se demostró debilidad del Estado, eso es más que nada es una conjetura de los expertos, sobre todo de nuestros adversarios”… No es así señor López, ya basta!!!

gamogui@hotmail.com