/ viernes 5 de mayo de 2023

Si quieres paz, prepárate para negociar 

Por Daniel Arévalo

“Si quieres paz, prepárate para la guerra”. Todos hemos escuchado la frase célebre de Vegecio, basada en el realismo político de la época romana, la cual es planteada hasta el día de hoy por parte de la OTAN, sin embargo, si cambiáramos la frase a “sí quieres paz, prepárate para el comercio” encontraríamos a la República Popular de China como el principal exponente. Este planteamiento se debe a su estrategia geopolítica idealista, la cual busca estimular la paz entre sus socios mediante la intercomplejidad económica y comercial de la iniciativa de la Franja y la Ruta, conformada por la Ruta de la Seda, el Collar de Perlas y la Ruta del Ártico.

Para garantizar el éxito de la iniciativa china, se requiere sofocar las disputas bélicas entre estados enemistados mediante el ofrecimiento de crecimiento económico, comercial y estabilidad social. El ejemplo más actualizado de la paz impulsada por China se encuentra en la reanudación de las relaciones diplomáticas entre Irán y Arabia Saudita, estos dos socios energéticos estratégicos son responsables de combatir en distintos escenarios geopolíticos de Medio Oriente, lo que ha ralentizado el desarrollo durante años.

El presidente de la República Popular China, Xi Jinping, tiene claro que el funcionamiento de la estrategia geopolítica de la Franja y la Ruta, depende de la seguridad, estabilidad y buena voluntad de la comunidad internacional, por lo que ha priorizado el uso de la Organización de Cooperación de Shanghái, para incitar el buen funcionamiento de las relaciones multilaterales entre sus colaboradores, donde la moneda de cambio sería el comercio, la diplomacia y la seguridad regional de Asia principalmente.

China ha buscado designarse como el nuevo mediador de la paz dentro de los conflictos internacionales desbancando a Estados Unidos, quien en reiteradas ocasiones, ha apostado por el belicismo en vez de la reconciliación dentro del Congreso de las Naciones Unidas. La propuesta de un mundo multipolar pasa por la recuperación de la soberanía dentro del nuevo contexto de la desglobalización, la cual abandona la idea de una Pax Americana, por una paz ‘Made in China’ (hecha en China).

La iniciativa china apuesta por una política exterior de coincidencia de opuestos dentro de una negociación de ganar-ganar, ésta postura tiene grandes retos que superar, como las negociaciones de paz entre el gobierno Yemení apoyado por Arabia Saudita y los rebeldes hutíes apoyados por Irán. China de igual forma ha planteado 12 puntos para la paz en Ucrania y ha sido tan importante su declaración, que distintos mandatarios de la Unión Europea han viajado a Pekín para ser tomados en cuenta dentro de esta nueva orden de paz.

Por Daniel Arévalo

“Si quieres paz, prepárate para la guerra”. Todos hemos escuchado la frase célebre de Vegecio, basada en el realismo político de la época romana, la cual es planteada hasta el día de hoy por parte de la OTAN, sin embargo, si cambiáramos la frase a “sí quieres paz, prepárate para el comercio” encontraríamos a la República Popular de China como el principal exponente. Este planteamiento se debe a su estrategia geopolítica idealista, la cual busca estimular la paz entre sus socios mediante la intercomplejidad económica y comercial de la iniciativa de la Franja y la Ruta, conformada por la Ruta de la Seda, el Collar de Perlas y la Ruta del Ártico.

Para garantizar el éxito de la iniciativa china, se requiere sofocar las disputas bélicas entre estados enemistados mediante el ofrecimiento de crecimiento económico, comercial y estabilidad social. El ejemplo más actualizado de la paz impulsada por China se encuentra en la reanudación de las relaciones diplomáticas entre Irán y Arabia Saudita, estos dos socios energéticos estratégicos son responsables de combatir en distintos escenarios geopolíticos de Medio Oriente, lo que ha ralentizado el desarrollo durante años.

El presidente de la República Popular China, Xi Jinping, tiene claro que el funcionamiento de la estrategia geopolítica de la Franja y la Ruta, depende de la seguridad, estabilidad y buena voluntad de la comunidad internacional, por lo que ha priorizado el uso de la Organización de Cooperación de Shanghái, para incitar el buen funcionamiento de las relaciones multilaterales entre sus colaboradores, donde la moneda de cambio sería el comercio, la diplomacia y la seguridad regional de Asia principalmente.

China ha buscado designarse como el nuevo mediador de la paz dentro de los conflictos internacionales desbancando a Estados Unidos, quien en reiteradas ocasiones, ha apostado por el belicismo en vez de la reconciliación dentro del Congreso de las Naciones Unidas. La propuesta de un mundo multipolar pasa por la recuperación de la soberanía dentro del nuevo contexto de la desglobalización, la cual abandona la idea de una Pax Americana, por una paz ‘Made in China’ (hecha en China).

La iniciativa china apuesta por una política exterior de coincidencia de opuestos dentro de una negociación de ganar-ganar, ésta postura tiene grandes retos que superar, como las negociaciones de paz entre el gobierno Yemení apoyado por Arabia Saudita y los rebeldes hutíes apoyados por Irán. China de igual forma ha planteado 12 puntos para la paz en Ucrania y ha sido tan importante su declaración, que distintos mandatarios de la Unión Europea han viajado a Pekín para ser tomados en cuenta dentro de esta nueva orden de paz.