/ viernes 15 de junio de 2018

Sin Gafete

El dolor de cabeza de Ayotzinapa


Les ganó el “viejo estilo”. Las ganas de “tapar” cualquier sospecha, a cualquier costo. La urgencia de encontrar “culpables” que apoyasen una verdad histórica que establecido a conveniencia coyuntural.

La falta de una respuesta política a tiempo, la ingenuidad en Los Pinos frente a una tragedia que sigue siendo presente… todo esto, más, les falló a los estrategas del poder frente a la desaparición de 43 estudiantes.

Y por eso, porque se equivocaron desde el principio, es que siguen surgiendo respuestas sociales a lo que consideran un asunto abierto.

De ahí deriva la decisión de un Tribunal Colegiado de Tamaulipas, vaya usted a saber porque de esa entidad precisamente, para “establecer” una Comisión de la Verdad.

Que no será. No en los términos que establecieron los jueces, seguramente fuera de su ámbito de acción. No importa. Se ha logrado, en el umbral de una elección presidencial, refutar las razones jurídicas-legales de la “solución” que dio el gobierno a este problema.

Y se volvió a poner sobre la mesa de discusiones la incapacidad de la PGR para convencer de sus “verdades”. Se alimentó, desde Tamaulipas, el “sospechosísmo” que estaba vigente, se le dio actualidad política.

¿Es importante?

Mucho. Es una batalla ganada, de cara a los medios, en un momento crucial para la historia del país, por quienes han venido luchando estos años por otra “verdad histórica” respecto a los estudiantes que, seguramente, están muertos.

El tema sigue siendo quién los mató y por qué razones. Y si en el secuestro participaron militares. La negativa del titular de la Sedena, general Salvador Cienfuegos, para que fuesen “interrogados” quienes recibieron el calificativo de “sus soldados”, como si fuesen de su pertenencia, no hizo sino alimentar esta versión.

¿Van a quedar libres varios de los “inculpados” por estos hechos? Seguramente. Porque existen elementos, según los jueces que se pronunciaron al respecto, para creer que fueron sometidos a tortura. Algo que siempre está presente en los ciudadanos que tienen que confrontarse con las instituciones de impartición de justicia. Un temor que está sustentado en muchos testimonios y hasta en vídeos.

¿O es que alguno metería las manos al fuego respecto a que no existe tortura, por parte de los policías y demás autoridades?

Si no se cumple con el “debido proceso”, nos ha quedado establecido por varios casos con resonancia nacional, los jueces van a dejar en libertad a presuntos responsables de los “desaparición” de los 43 estudiantes de Ayotzinapa.

No despreciemos, en todo esto, las declaraciones de Andrés Manuel López Obrador, durante varios eventos de campaña, aseverando que debe “esclarecerse” el papel que desempeñó el Ejército en la “noche de Iguala”.

Sea viable, supongo que no lo será, la expresión del Tribunal Colegiado de Tamaulipas o simple retórica, ya se cumplió con volver a poner Ayotzinapa en la discusión nacional. Para aumentar el dolor de cabeza de los protagonistas públicos…


@isabelarvide / EstadoMayor.mx / CambioQRR.com


El dolor de cabeza de Ayotzinapa


Les ganó el “viejo estilo”. Las ganas de “tapar” cualquier sospecha, a cualquier costo. La urgencia de encontrar “culpables” que apoyasen una verdad histórica que establecido a conveniencia coyuntural.

La falta de una respuesta política a tiempo, la ingenuidad en Los Pinos frente a una tragedia que sigue siendo presente… todo esto, más, les falló a los estrategas del poder frente a la desaparición de 43 estudiantes.

Y por eso, porque se equivocaron desde el principio, es que siguen surgiendo respuestas sociales a lo que consideran un asunto abierto.

De ahí deriva la decisión de un Tribunal Colegiado de Tamaulipas, vaya usted a saber porque de esa entidad precisamente, para “establecer” una Comisión de la Verdad.

Que no será. No en los términos que establecieron los jueces, seguramente fuera de su ámbito de acción. No importa. Se ha logrado, en el umbral de una elección presidencial, refutar las razones jurídicas-legales de la “solución” que dio el gobierno a este problema.

Y se volvió a poner sobre la mesa de discusiones la incapacidad de la PGR para convencer de sus “verdades”. Se alimentó, desde Tamaulipas, el “sospechosísmo” que estaba vigente, se le dio actualidad política.

¿Es importante?

Mucho. Es una batalla ganada, de cara a los medios, en un momento crucial para la historia del país, por quienes han venido luchando estos años por otra “verdad histórica” respecto a los estudiantes que, seguramente, están muertos.

El tema sigue siendo quién los mató y por qué razones. Y si en el secuestro participaron militares. La negativa del titular de la Sedena, general Salvador Cienfuegos, para que fuesen “interrogados” quienes recibieron el calificativo de “sus soldados”, como si fuesen de su pertenencia, no hizo sino alimentar esta versión.

¿Van a quedar libres varios de los “inculpados” por estos hechos? Seguramente. Porque existen elementos, según los jueces que se pronunciaron al respecto, para creer que fueron sometidos a tortura. Algo que siempre está presente en los ciudadanos que tienen que confrontarse con las instituciones de impartición de justicia. Un temor que está sustentado en muchos testimonios y hasta en vídeos.

¿O es que alguno metería las manos al fuego respecto a que no existe tortura, por parte de los policías y demás autoridades?

Si no se cumple con el “debido proceso”, nos ha quedado establecido por varios casos con resonancia nacional, los jueces van a dejar en libertad a presuntos responsables de los “desaparición” de los 43 estudiantes de Ayotzinapa.

No despreciemos, en todo esto, las declaraciones de Andrés Manuel López Obrador, durante varios eventos de campaña, aseverando que debe “esclarecerse” el papel que desempeñó el Ejército en la “noche de Iguala”.

Sea viable, supongo que no lo será, la expresión del Tribunal Colegiado de Tamaulipas o simple retórica, ya se cumplió con volver a poner Ayotzinapa en la discusión nacional. Para aumentar el dolor de cabeza de los protagonistas públicos…


@isabelarvide / EstadoMayor.mx / CambioQRR.com