/ miércoles 15 de agosto de 2018

Sin Gafete | Reconocimiento a Patrocinio González Garrido

De la manera más ruin, grupos políticos chiapanecos se lanzaron contra la presea por méritos ambientalistas que le entregó el Congreso al exsecretario de Gobernación, Patrocinio González Garrido. Lo que no es extraño en esa entidad donde uno de los deportes populares es la denigración del prójimo.

Patrocinio se ha dedicado, después de retirarse de la política, a un proyecto ecológico en Palenque que es admiración de universidades extranjeras y de instituciones dedicadas a la conservación de las especies. En su parque ecológico “Los Aluxes” ha conseguido el milagro de revertir la extinción de las guacamayas rojas. Consiguiendo que de 100 ejemplares que existían hoy el número rebase los 800, y hayan sobrevivido en libertad después de haber sido entregadas a otros parques recreativos o soltadas en la selva.

Un repaso sobre quién es haría bien a sus críticos. Porque Patrocinio fue político toda su vida. Uno de los mejores polemistas, oradores que he conocido. Le correspondió, cuando esto era todo un ejercicio del discurso, participar en la Secretaría de Gobernación en la discusión de las diputaciones, cuando ahí se dictaminaban, antes de que existiese el INE. Y vaya que era complicado imponerse sobre oradores del PAN con excelencia.

Fue senador, después gobernador de Chiapas, de donde lo trajo Carlos Salinas de Gortari, un poco contra su voluntad, a la Secretaría de Gobernación. Quienes conocen Chiapas saben que otra hubiese sido la historia de 1994 y su guerra si se hubiese quedado en el gobierno. Luego fue, injustamente, “renunciado” cuando los eventos bélicos se salieron de control y se buscaba un “culpable” a modo.

A partir de ahí el silencio.

Y la creación, sin apoyo oficial, junto con su hija Josefa, de “Los Aluxes”.

¿Qué deben hacer los políticos que se retiran? Cuando las historias personales se completan en ámbitos públicos es, tiene que ser, muy complicado encontrar otros espacios propicios. Lo fácil es encerrarse en su casa, a veces con amargura. En lugar de esto, Patrocinio González Garrido se dedicó, con sus propios recursos, a la conservación de especies en un parque que es una delicia para quien lo visita, un lugar donde ha conseguido reunir, sin comprar un solo animal, a toda la fauna de la región en condiciones óptimas.

La presea que le fue entregada se llama Miguel Álvarez del Toro, quien fue uno de los hombres más comprometidos, en Chiapas, justamente con las especies animales. Y que hizo un gran trabajo en el zoológico de Tuxtla Gutiérrez.

De Patrocinio abundan las anécdotas, hombre de ingenio muy afilado, una de ellas sucedió cuando fue a ver a su amigo José López Portillo al destape del general Absalón Castellanos Domínguez como candidato del PRI al gobierno de Chiapas, para pedirle que lo mandase a encabezar una zona militar ya que de esta manera estaba calificando las cualidades de cada uno… “Si él puede ser gobernador, yo puedo ser jefe de Zona Militar”.

Una manera de hacer política, de vivir la política, se significa con él. Ahora, también, una forma de cuidar que el mundo sea mejor para los que siguen…


De la manera más ruin, grupos políticos chiapanecos se lanzaron contra la presea por méritos ambientalistas que le entregó el Congreso al exsecretario de Gobernación, Patrocinio González Garrido. Lo que no es extraño en esa entidad donde uno de los deportes populares es la denigración del prójimo.

Patrocinio se ha dedicado, después de retirarse de la política, a un proyecto ecológico en Palenque que es admiración de universidades extranjeras y de instituciones dedicadas a la conservación de las especies. En su parque ecológico “Los Aluxes” ha conseguido el milagro de revertir la extinción de las guacamayas rojas. Consiguiendo que de 100 ejemplares que existían hoy el número rebase los 800, y hayan sobrevivido en libertad después de haber sido entregadas a otros parques recreativos o soltadas en la selva.

Un repaso sobre quién es haría bien a sus críticos. Porque Patrocinio fue político toda su vida. Uno de los mejores polemistas, oradores que he conocido. Le correspondió, cuando esto era todo un ejercicio del discurso, participar en la Secretaría de Gobernación en la discusión de las diputaciones, cuando ahí se dictaminaban, antes de que existiese el INE. Y vaya que era complicado imponerse sobre oradores del PAN con excelencia.

Fue senador, después gobernador de Chiapas, de donde lo trajo Carlos Salinas de Gortari, un poco contra su voluntad, a la Secretaría de Gobernación. Quienes conocen Chiapas saben que otra hubiese sido la historia de 1994 y su guerra si se hubiese quedado en el gobierno. Luego fue, injustamente, “renunciado” cuando los eventos bélicos se salieron de control y se buscaba un “culpable” a modo.

A partir de ahí el silencio.

Y la creación, sin apoyo oficial, junto con su hija Josefa, de “Los Aluxes”.

¿Qué deben hacer los políticos que se retiran? Cuando las historias personales se completan en ámbitos públicos es, tiene que ser, muy complicado encontrar otros espacios propicios. Lo fácil es encerrarse en su casa, a veces con amargura. En lugar de esto, Patrocinio González Garrido se dedicó, con sus propios recursos, a la conservación de especies en un parque que es una delicia para quien lo visita, un lugar donde ha conseguido reunir, sin comprar un solo animal, a toda la fauna de la región en condiciones óptimas.

La presea que le fue entregada se llama Miguel Álvarez del Toro, quien fue uno de los hombres más comprometidos, en Chiapas, justamente con las especies animales. Y que hizo un gran trabajo en el zoológico de Tuxtla Gutiérrez.

De Patrocinio abundan las anécdotas, hombre de ingenio muy afilado, una de ellas sucedió cuando fue a ver a su amigo José López Portillo al destape del general Absalón Castellanos Domínguez como candidato del PRI al gobierno de Chiapas, para pedirle que lo mandase a encabezar una zona militar ya que de esta manera estaba calificando las cualidades de cada uno… “Si él puede ser gobernador, yo puedo ser jefe de Zona Militar”.

Una manera de hacer política, de vivir la política, se significa con él. Ahora, también, una forma de cuidar que el mundo sea mejor para los que siguen…