/ martes 9 de noviembre de 2021

Teatrikando | The Prom, en excelente nivel

Una de las pocas comedias musicales donde se transmite una idea importante, porque siempre se han perdido en platicar que una tía está medio loca; en la Revolución Francesa hay un gran amor; dos gays fingen que uno de ellos es cantante varonil o que unos marcianos travestis andan rondando por ahí, así podríamos seguir hablando de musicales que son bellísimos, pero, con una transmisión de conceptos un tanto banal.

No, en esta ocasión hay una aportación de mayor impacto a un tema actual, las parejas del mismo sexo y su mala aceptación en las sociedades conservadoras y tradicionalistas.

En este caso adaptan la obra y dicen que se trata de Salamanca, un pueblito pequeño donde no aceptan al mundo gay. No creo que se vayan a enojar en Guanajuato por esta alusión que nada aporta en realidad. Ese estado es medio conservador, en realidad, pero ese no es el tema. Seguramente no podrán dar funciones en el Cervantino, pero fuera de bromas el problema es de mayores dimensiones.

Pasemos a la obra: El elenco es Anahi Allué, Gerardo González, Beto Torres, Oscar Carapia. Susana Zabaleta*, Oscar Carapia*, Majo Perez*, Mauricio Salas, Guana*, Brenda Santabalbina, Esteban Provenzano*, Marien Caballero*, Samantha Salgado, Daiana Liparoti Susana Zabaleta*, Majo Perez*, Mauricio Salas*. (*Alternan personaje).

Excelente montaje en que el color y la plástica imperan, desde el primer momento, pues nos recibe un telón multicolor que parpadea. El vestuario es impecable, nada le falta ni sobra, los jóvenes se visten de una forma y los de más añitos toman otros caminos vintage. La música es muy bella, las rolas se dejan disfrutar y las voces son espléndidas, sólo un par de canciones no me jalaron; como que están de más, retumba un bajo aumentado frecuentemente.

Media hora o una hora que le quitaran ayudaría mucho, yo sé que es difícil en una franquicia que se logre modificar la estructura, pero habría que intentarlo, para que no se sienta pesada.

De las actuaciones les diré que el ex Cachún, Gerardo González, es un actor completo, bailando tiene gracia, cantando es excelente, pero actuando logra darnos tonos e intenciones que otro difícilmente lograrían. Anahí Allué está en su mejor nivel; Beto Torres nos convence de que es un rector universitario que se sabe oponer a una mujer crítica sin seso. Por su parte Oscar Carapia está muy suelto y con gracia.

Las coreografías están bien diseñadas y cumplidas, me parecieron con equilibrio las grandes composiciones dancísticas, que son la base de los musicales, se exigieron y cumplieron.

En resumen les comentaré: me gustó.

Precios medianos para un musical de 700 a 2,200 , hay descuentos.

Una de las pocas comedias musicales donde se transmite una idea importante, porque siempre se han perdido en platicar que una tía está medio loca; en la Revolución Francesa hay un gran amor; dos gays fingen que uno de ellos es cantante varonil o que unos marcianos travestis andan rondando por ahí, así podríamos seguir hablando de musicales que son bellísimos, pero, con una transmisión de conceptos un tanto banal.

No, en esta ocasión hay una aportación de mayor impacto a un tema actual, las parejas del mismo sexo y su mala aceptación en las sociedades conservadoras y tradicionalistas.

En este caso adaptan la obra y dicen que se trata de Salamanca, un pueblito pequeño donde no aceptan al mundo gay. No creo que se vayan a enojar en Guanajuato por esta alusión que nada aporta en realidad. Ese estado es medio conservador, en realidad, pero ese no es el tema. Seguramente no podrán dar funciones en el Cervantino, pero fuera de bromas el problema es de mayores dimensiones.

Pasemos a la obra: El elenco es Anahi Allué, Gerardo González, Beto Torres, Oscar Carapia. Susana Zabaleta*, Oscar Carapia*, Majo Perez*, Mauricio Salas, Guana*, Brenda Santabalbina, Esteban Provenzano*, Marien Caballero*, Samantha Salgado, Daiana Liparoti Susana Zabaleta*, Majo Perez*, Mauricio Salas*. (*Alternan personaje).

Excelente montaje en que el color y la plástica imperan, desde el primer momento, pues nos recibe un telón multicolor que parpadea. El vestuario es impecable, nada le falta ni sobra, los jóvenes se visten de una forma y los de más añitos toman otros caminos vintage. La música es muy bella, las rolas se dejan disfrutar y las voces son espléndidas, sólo un par de canciones no me jalaron; como que están de más, retumba un bajo aumentado frecuentemente.

Media hora o una hora que le quitaran ayudaría mucho, yo sé que es difícil en una franquicia que se logre modificar la estructura, pero habría que intentarlo, para que no se sienta pesada.

De las actuaciones les diré que el ex Cachún, Gerardo González, es un actor completo, bailando tiene gracia, cantando es excelente, pero actuando logra darnos tonos e intenciones que otro difícilmente lograrían. Anahí Allué está en su mejor nivel; Beto Torres nos convence de que es un rector universitario que se sabe oponer a una mujer crítica sin seso. Por su parte Oscar Carapia está muy suelto y con gracia.

Las coreografías están bien diseñadas y cumplidas, me parecieron con equilibrio las grandes composiciones dancísticas, que son la base de los musicales, se exigieron y cumplieron.

En resumen les comentaré: me gustó.

Precios medianos para un musical de 700 a 2,200 , hay descuentos.