/ sábado 19 de marzo de 2022

Tech trends | OLED

En un contexto como el que vivimos actualmente, las pantallas y los televisores son parte relevante de nuestra vida en casa; nos permiten tener entretenimiento, conectividad y versatilidad para utilizarlos como herramienta de trabajo. Ante la demanda de contar con televisores que nos permitan realizar más actividades la innovación ha sido exponencial, comparada con las décadas en las que la TV solo cambió de blanco y negro a colores.

A menudo pensamos en la tecnología como un avance inmediato, vemos los productos como algo que damos por hecho, pero los desarrollos innovadores que actualmente vemos son en realidad la culminación de años de trabajo. Un ejemplo de esa innovación es OLED, una tecnología que puede cambiar la experiencia del cliente para siempre, e incluso puede inspirar a la competencia.

Actualmente la gente que sabe de televisores tiene claro que el mejor televisor del mundo tiene que venir de la tecnología OLED, que por sus características la hacen única para ofrecer la imagen más clara. La historia de esta tecnología ha sido rápida, inició en 1987, desarrollada por Kodak, y fue en 2004 cuando ya se lanzaron algunos productos innovadores pero muy costosos.

LG apostó por esta tecnología desde 2010, con una pantalla de 15 pulgadas y dos años después se anunciaría el primer modelo de 55 pulgadas. Casi 10 años después los competidores se dieron cuenta que estaban en el camino equivocado y apuntaron hacia OLED. Sony presentó recientemente la serie QD-OLED TV A95K, con una sorprendente imagen, pero con un precio fuera del alcance de la mayoría de los consumidores.

Mientras Samsung comprendió que si quería luchar por tener el mejor televisor del mundo debía subirse al ring de OLED, un escenario que había evitado por años y que incluso había denostado, señalando que era una tecnología que no ofrecía el suficiente brillo y que corría el riesgo de quemar la imagen, como lo menciona Vicent Teoh, uno de los analistas más reconocidos del mundo en tema de televisores al momento de analizar el modelo S95B QD-OLED de esta compañía coreana.

Ahora que los principales fabricantes de TV están en OLED enfrentan no sólo tener la mejor tecnología sino precios competitivos, algo que LG ha logrado conseguir gracias a las ventas de escala de estos productos.

El mercado mundial de televisores OLED creció 80 por ciento interanual, hasta los 6.53 millones de unidades en 2021 y de acuerdo con el fabricante Omdia se espera que el mercado mundial de televisores OLED siga creciendo hasta los ocho millones de unidades este año, con una participación del segmento en todo el mercado de televisores estimada en 12.7 por ciento.

LG es el líder mundial en venta de televisores OLED y estima que el envío de estos modelos casi se duplicó a 4.05 millones de unidades el año pasado.

LG ha dicho que espera que sus modelos de televisores OLED representen 42.1 por ciento del mercado de televisores de más de mil 500 dólares, lo que nos indica que su presencia seguirá sostenida en el mercado premium.

Y es que debido a la necesidad de tener televisores más inteligentes los consumidores son más juiciosos y quieren tener la mejor tecnología a un precio razonable.

En un contexto como el que vivimos actualmente, las pantallas y los televisores son parte relevante de nuestra vida en casa; nos permiten tener entretenimiento, conectividad y versatilidad para utilizarlos como herramienta de trabajo. Ante la demanda de contar con televisores que nos permitan realizar más actividades la innovación ha sido exponencial, comparada con las décadas en las que la TV solo cambió de blanco y negro a colores.

A menudo pensamos en la tecnología como un avance inmediato, vemos los productos como algo que damos por hecho, pero los desarrollos innovadores que actualmente vemos son en realidad la culminación de años de trabajo. Un ejemplo de esa innovación es OLED, una tecnología que puede cambiar la experiencia del cliente para siempre, e incluso puede inspirar a la competencia.

Actualmente la gente que sabe de televisores tiene claro que el mejor televisor del mundo tiene que venir de la tecnología OLED, que por sus características la hacen única para ofrecer la imagen más clara. La historia de esta tecnología ha sido rápida, inició en 1987, desarrollada por Kodak, y fue en 2004 cuando ya se lanzaron algunos productos innovadores pero muy costosos.

LG apostó por esta tecnología desde 2010, con una pantalla de 15 pulgadas y dos años después se anunciaría el primer modelo de 55 pulgadas. Casi 10 años después los competidores se dieron cuenta que estaban en el camino equivocado y apuntaron hacia OLED. Sony presentó recientemente la serie QD-OLED TV A95K, con una sorprendente imagen, pero con un precio fuera del alcance de la mayoría de los consumidores.

Mientras Samsung comprendió que si quería luchar por tener el mejor televisor del mundo debía subirse al ring de OLED, un escenario que había evitado por años y que incluso había denostado, señalando que era una tecnología que no ofrecía el suficiente brillo y que corría el riesgo de quemar la imagen, como lo menciona Vicent Teoh, uno de los analistas más reconocidos del mundo en tema de televisores al momento de analizar el modelo S95B QD-OLED de esta compañía coreana.

Ahora que los principales fabricantes de TV están en OLED enfrentan no sólo tener la mejor tecnología sino precios competitivos, algo que LG ha logrado conseguir gracias a las ventas de escala de estos productos.

El mercado mundial de televisores OLED creció 80 por ciento interanual, hasta los 6.53 millones de unidades en 2021 y de acuerdo con el fabricante Omdia se espera que el mercado mundial de televisores OLED siga creciendo hasta los ocho millones de unidades este año, con una participación del segmento en todo el mercado de televisores estimada en 12.7 por ciento.

LG es el líder mundial en venta de televisores OLED y estima que el envío de estos modelos casi se duplicó a 4.05 millones de unidades el año pasado.

LG ha dicho que espera que sus modelos de televisores OLED representen 42.1 por ciento del mercado de televisores de más de mil 500 dólares, lo que nos indica que su presencia seguirá sostenida en el mercado premium.

Y es que debido a la necesidad de tener televisores más inteligentes los consumidores son más juiciosos y quieren tener la mejor tecnología a un precio razonable.