arecieran muchos los 86 días que faltan para que arranque la Copa del Mundo de Rusia 2018. Para unos puede parecer lejano, pero para otros el tiempo pasará demasiado rápido, y a los partidos que restan de preparación algunos sacarán más provecho que otros.
La Selección Mexicana, por ejemplo, jugará contra Islandia y Croacia, y estos encuentros le servirán a Juan Carlos Osorio para quitarse las dudas sobre algunos, muy pocos jugadores, para tomar la decisión final de la lista definitiva. Ojalá que el técnico aproveche esos juegos para hacer un simulacro de lo que va a hacer en el Campeonato Mundial.
Quizá los rivales no son tan atractivos en el papel, pero dada la cercanía habrá que sacar provecho de ellos. Habrá que imaginarnos que Islandia es Suecia, para preparar una estrategia y ver cómo se jugaría tácticamente, y el mismo caso con Croacia, imaginándonos que es Alemania. Creo que donde quedaríamos a deber es un simulacro de un estilo parecido al de Corea, pues ya no vamos a tener un tercer partido con un rival que ofreciera un estilo parecido al de los asiáticos.
Vaya diferencia de los rivales que tendrá España, que es mi referencia en casi todo en lo que a futbol se refiere, ya que los ibéricos se medirán, haciendo también simulacros rumbo a la justa mundialista, ante unos rivales de nivel de exigencia demasiado alto y que están contemplados para quedar en las altas instancias del torneo mundialista. Suenan muy bien la selección de Alemania, que es uno de los principales favoritos para llevarse la Copa del Mundo y defender con éxito su título obtenido en Brasil, en el 2014, y Argentina, que comandada por Messi quiere dar el golpe sobre la mesa y hacerse con este campeonato, que se le resiste sobre todo justamente a Messi.
Los españoles también están pensando en grande, por eso el nivel de los rivales para el cierre de la preparación.
ADIÓS AL ÚLTIMO INVICTO
Cayó el único invicto que quedaba en la Liga Mexicana, el América, ante un incómodo Toluca, al que le sienta bien la Ciudad de México. Será porque no le afecta en absoluto la altura, puesto que ellos trabajan a una altura todavía mayor. Pero definitivamente no sólo eso habrá influido, más bien pienso que los jugadores y el equipo se están viendo contundentes, y esto ha podido influir en el comportamiento del entrenador Hernán Cristante, quien inició con Toluca como director técnico y ha mejorado su personalidad junto con su carácter, que antes era más bien tibio, y se parecía a varios otros técnicos que dan esa imagen.
Seguramente asesores o dirigentes toluqueños le han recomendado endurecer su personalidad y obviamente exteriorizar el carácter más fuerte para irradiar a los jugadores lo mismo, pero tampoco hay que exagerar con el comportamiento que tuvieron tanto Miguel Herrera como él. Lo de Miguel es algo natural, lo conocemos y siempre ha sido así, pero de Cristante nos llama la atención el cómo actuó, sujetando del cuello a Herrera, en una imagen poco agradable. Ojalá que el carácter se manifieste de otra manera y no llegar a esos extremos, ya que los jugadores querrán hacer lo mismo que el líder que los comanda en esta ocasión. El liderazgo se demuestra de otra manera, con conocimientos, con capacidades, con personalidad, con carácter y, sobre todo, con ejemplo.
Me gustaría que todos los jugadores, directivos, técnicos y aficionados mostraran respeto entre ellos y, en conclusión, que todos nos respetemos en este mundo.
DRAMÁTICO EMPATE
El sábado se vivió un partido dramático entre Cruz Azul y Pumas, ya que los dos están con muchas necesidades de alzarse con un triunfo en este torneo, y aunque Pumas estuvo más cerca de conseguirlo, a ninguno de los dos se le dio, ya que faltando escasos segundos, prácticamente en la última jugada del partido, vino este empate que los celestes festejaron como si fuera un triunfo. Es normal cuando se está en una racha no muy buena y que lo mismo le está pasando a Pumas con esa racha sin victoria de seis partidos, una racha que se ha ido alargando de manera preocupante. Hay que recordar que el último campeonato de Pumas lo consiguió en el Torneo de Clausura 2011, y Cruz Azul en el ya muy lejano 1997, así que la diferencia entre uno y otro es abismal, y la urgencia es mayor para la escuadra celeste, aunque eso sí, no dejaré de insistir en que lo que hace falta en Pumas es reforzarse más para recuperar la grandeza del club.
¡Que te lo digo yo!
