/ domingo 17 de marzo de 2019

¿Tres de tres?

Yasmín Esquivel Mossa es la nueva ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación…


Entre escándalos, oposición y consenso, finalmente la esposa de José María Riobóo fue la elegida, cerrando así la pinza“perfecta” para que el presidente Andrés M. López cuente con aliados en los otros dos poderes “de la Unión”, dado que él mismo representa el Ejecutivo; todos somos testigos de que en campaña, López suplicó al pueblo otorgar la mayoría en el Congreso para él y su Morena, atributo que –hemos de reconocer-,ganó a pulso; y finalmente Yasmín – cuyos méritos igualmente son loables-,resultó ganadora entre la terna que el mismo Andrés Manuel presentó alLegislativo para cubrir la plaza de Ministro que quedaría vacante.

Pero el asunto no es menor: Organizaciones civiles especializadas en transparencia y rendición de cuentas alzaron la voz para exigir cambios en el proceso de designación de ministros de la SupremaCorte de Justicia de la Nación (SCJN), luego de la elección de Esquivel Mossa, cuestionando su idoneidad para el cargo.

En un comunicado conjunto, Artículo 19, laComisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, EquisJusticia para las Mujeres, Fundar, el Grupo de Información en ReproducciónElegida, el Instituto de Liderazgo Simone de Beauvoir y México Evalúa, entre otras agrupaciones, calificaron de "preocupante" la decisión que tomó el Senado este martes: "Esta designación sucedió pese al riesgo de conflictos de intereses al momento de impartir justicia, su postura contraria a los derechos humanos y sus pocos conocimientos para desempeñar el cargo",señalaron.

Hemos de decir que, desde el momento en que Yasmin Esquivel fue propuesta por el presidente Andrés López para ocupar la plaza, políticos de oposición y expertos en temas de laJudicatura advirtieron de un posible conflicto de interés derivado de que la jurista es esposa del empresario José María Riobóo, quien ha sido contratista y consultor del jefe del Poder Ejecutivo, por lo que la propia Esquivel rechazó que sus relaciones personales pongan en duda su independencia, a la vez que defendió su propia trayectoria profesional.

Por lo anterior, organizaciones civiles se pronunciaron a favor de cambiar los procesos de designación de ministros, con normas claras, garantías normativas para el fortalecimiento de la independencia judicial y mecanismos transparentes y abiertos a la participación ciudadana:"Urge promover mecanismos que impidan la interferencia de intereses económicos y políticos en los procesos de designación, toda vez que con esta designación tanto el Senado como el presidente LópezObrador le han quedado deber a la sociedad… Un proceso de designación transparente y con participación ciudadana sustantiva. Emitir un voto que le permita a la ciudadanía conocer quién apoyó a la ministra. Una terna con perfiles destacados. Un proceso que deje de lado los acuerdos políticos y vele por fortalecer la independencia judicial de la SCJN”.

Al respecto, Andrés Manuel LópezObrador descartó que exista conflicto de intereses en el nombramiento de Yasmín Esquivel como ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación a pesar de los cuestionamientos por la cercanía de su esposo, el ingeniero José María Riobóo, con su gobierno.

“A nadie le digo vas a estar en la terna y eres mi preferida, mi preferido, habla con tal senador... ya le di indicaciones, ya lo instruí. Son los senadores los que resuelven”, dijo en conferencia matutina al ser cuestionado por las críticas que ha generado la elección de Esquivel. Destacó la trayectoria de la ahora ministra, quien también ha sido señalada por sus posturas en materia de derechos humanos, sobre el aborto y la comunidad LGBTTTI: Es una mujer con preparación con méritos, egresada de la UNAM, con maestría, con doctorado, se ha desempeñado encargos también relacionados con el Poder Judicial, en áreas de administración de justicia”, dijo.

Independientemente de los “dimes y diretes”, lo cierto es que, con la designación, el Ejecutivo da un paso adelante —como lo hizo hace poco también con la del ministro JoséLuis González Alcántara Carrancá— quien igualmente con sus méritos lo merece pero, también es afín al proyecto de este gobierno…

Lo que está en juego es solamente la autonomía del Poder Judicial en este incierto y complicado ámbito de la política actual, así nomás.

gamogui@hotmail.com


Yasmín Esquivel Mossa es la nueva ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación…


Entre escándalos, oposición y consenso, finalmente la esposa de José María Riobóo fue la elegida, cerrando así la pinza“perfecta” para que el presidente Andrés M. López cuente con aliados en los otros dos poderes “de la Unión”, dado que él mismo representa el Ejecutivo; todos somos testigos de que en campaña, López suplicó al pueblo otorgar la mayoría en el Congreso para él y su Morena, atributo que –hemos de reconocer-,ganó a pulso; y finalmente Yasmín – cuyos méritos igualmente son loables-,resultó ganadora entre la terna que el mismo Andrés Manuel presentó alLegislativo para cubrir la plaza de Ministro que quedaría vacante.

Pero el asunto no es menor: Organizaciones civiles especializadas en transparencia y rendición de cuentas alzaron la voz para exigir cambios en el proceso de designación de ministros de la SupremaCorte de Justicia de la Nación (SCJN), luego de la elección de Esquivel Mossa, cuestionando su idoneidad para el cargo.

En un comunicado conjunto, Artículo 19, laComisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, EquisJusticia para las Mujeres, Fundar, el Grupo de Información en ReproducciónElegida, el Instituto de Liderazgo Simone de Beauvoir y México Evalúa, entre otras agrupaciones, calificaron de "preocupante" la decisión que tomó el Senado este martes: "Esta designación sucedió pese al riesgo de conflictos de intereses al momento de impartir justicia, su postura contraria a los derechos humanos y sus pocos conocimientos para desempeñar el cargo",señalaron.

Hemos de decir que, desde el momento en que Yasmin Esquivel fue propuesta por el presidente Andrés López para ocupar la plaza, políticos de oposición y expertos en temas de laJudicatura advirtieron de un posible conflicto de interés derivado de que la jurista es esposa del empresario José María Riobóo, quien ha sido contratista y consultor del jefe del Poder Ejecutivo, por lo que la propia Esquivel rechazó que sus relaciones personales pongan en duda su independencia, a la vez que defendió su propia trayectoria profesional.

Por lo anterior, organizaciones civiles se pronunciaron a favor de cambiar los procesos de designación de ministros, con normas claras, garantías normativas para el fortalecimiento de la independencia judicial y mecanismos transparentes y abiertos a la participación ciudadana:"Urge promover mecanismos que impidan la interferencia de intereses económicos y políticos en los procesos de designación, toda vez que con esta designación tanto el Senado como el presidente LópezObrador le han quedado deber a la sociedad… Un proceso de designación transparente y con participación ciudadana sustantiva. Emitir un voto que le permita a la ciudadanía conocer quién apoyó a la ministra. Una terna con perfiles destacados. Un proceso que deje de lado los acuerdos políticos y vele por fortalecer la independencia judicial de la SCJN”.

Al respecto, Andrés Manuel LópezObrador descartó que exista conflicto de intereses en el nombramiento de Yasmín Esquivel como ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación a pesar de los cuestionamientos por la cercanía de su esposo, el ingeniero José María Riobóo, con su gobierno.

“A nadie le digo vas a estar en la terna y eres mi preferida, mi preferido, habla con tal senador... ya le di indicaciones, ya lo instruí. Son los senadores los que resuelven”, dijo en conferencia matutina al ser cuestionado por las críticas que ha generado la elección de Esquivel. Destacó la trayectoria de la ahora ministra, quien también ha sido señalada por sus posturas en materia de derechos humanos, sobre el aborto y la comunidad LGBTTTI: Es una mujer con preparación con méritos, egresada de la UNAM, con maestría, con doctorado, se ha desempeñado encargos también relacionados con el Poder Judicial, en áreas de administración de justicia”, dijo.

Independientemente de los “dimes y diretes”, lo cierto es que, con la designación, el Ejecutivo da un paso adelante —como lo hizo hace poco también con la del ministro JoséLuis González Alcántara Carrancá— quien igualmente con sus méritos lo merece pero, también es afín al proyecto de este gobierno…

Lo que está en juego es solamente la autonomía del Poder Judicial en este incierto y complicado ámbito de la política actual, así nomás.

gamogui@hotmail.com