/ domingo 14 de febrero de 2021

Unidas contra la violencia de género

En los últimos años hemos visto como sociedad un avance importante en cuanto al entramado de instituciones y estrategias que están orientados a lograr la paridad entre hombres y mujeres, reducir la brecha salarial persistente y disminuir hasta erradicar las violencias de las que somos objeto las mujeres.

Paradójicamente, en esos años en los que logramos tener tanto en la Ciudad de México como a nivel federal, hemos pasado de 9 a 10 lamentables feminicidios diarios en el país

Este gobierno, en el que por primera vez una mujer ocupa la secretaria de gobernación, se ha negado sistemáticamente a reconocer el aumento de la violencia en el país, pese a que organizaciones de la sociedad civil lo tienen bien documentado.

La violencia que se gesta desde la desigualdad para el ejercicio de derechos de las mujeres parece ser mas fuerte que las más de 50 iniciativas impulsadas desde el Senado

en materia de paridad para lograr que mujeres y hombres ganemos lo mismo, así como los esfuerzos que miles de mujeres han hecho todos estos años por el acceso a la justicia y que se castigue a quienes nos violentan.

Hoy, tenemos la oportunidad de unirnos como mujeres, dejando de lado los colores partidistas y las preferencias políticas para exigir un cese a la violencia y para convencer a los hombres a que rompan ese pacto patriarcal que les garantiza impunidad.

El caso mas visible y que ha estado en la discusión pública es el del virtual candidato a la gubernatura de Guerrero: Félix Salgado Macedonio, pero no es el único y tristemente no será el último.

Si hoy logramos que Salgado Macedonio no sea candidato hasta que comparezca ante la justicia mexicana por las denuncias de violación sexual, no solo lograremos justicia para las víctimas, sentaremos un precedente importante tanto en MORENA como en todos los partidos, para que ningún presunto violador o perpetrador de violencia, pueda creer que las redes de poder son mas poderosas que la justicia.

Como mujeres que participamos en política es nuestro deber y responsabilidad alzar la voz y luchar para cerrar las puertas a la violencia institucional en contra de las mujeres, erradicar la revictimización y garantizar a muchísimas mujeres y niñas su derecho a vivir una vida libre de cualquier tipo de violencia.

En los últimos años hemos visto como sociedad un avance importante en cuanto al entramado de instituciones y estrategias que están orientados a lograr la paridad entre hombres y mujeres, reducir la brecha salarial persistente y disminuir hasta erradicar las violencias de las que somos objeto las mujeres.

Paradójicamente, en esos años en los que logramos tener tanto en la Ciudad de México como a nivel federal, hemos pasado de 9 a 10 lamentables feminicidios diarios en el país

Este gobierno, en el que por primera vez una mujer ocupa la secretaria de gobernación, se ha negado sistemáticamente a reconocer el aumento de la violencia en el país, pese a que organizaciones de la sociedad civil lo tienen bien documentado.

La violencia que se gesta desde la desigualdad para el ejercicio de derechos de las mujeres parece ser mas fuerte que las más de 50 iniciativas impulsadas desde el Senado

en materia de paridad para lograr que mujeres y hombres ganemos lo mismo, así como los esfuerzos que miles de mujeres han hecho todos estos años por el acceso a la justicia y que se castigue a quienes nos violentan.

Hoy, tenemos la oportunidad de unirnos como mujeres, dejando de lado los colores partidistas y las preferencias políticas para exigir un cese a la violencia y para convencer a los hombres a que rompan ese pacto patriarcal que les garantiza impunidad.

El caso mas visible y que ha estado en la discusión pública es el del virtual candidato a la gubernatura de Guerrero: Félix Salgado Macedonio, pero no es el único y tristemente no será el último.

Si hoy logramos que Salgado Macedonio no sea candidato hasta que comparezca ante la justicia mexicana por las denuncias de violación sexual, no solo lograremos justicia para las víctimas, sentaremos un precedente importante tanto en MORENA como en todos los partidos, para que ningún presunto violador o perpetrador de violencia, pueda creer que las redes de poder son mas poderosas que la justicia.

Como mujeres que participamos en política es nuestro deber y responsabilidad alzar la voz y luchar para cerrar las puertas a la violencia institucional en contra de las mujeres, erradicar la revictimización y garantizar a muchísimas mujeres y niñas su derecho a vivir una vida libre de cualquier tipo de violencia.