/ miércoles 3 de julio de 2019

¿Y Europa apá?

Acompáñenme a hacer un repaso por el mundo informativamente hablando. En los días y/o semanas recientes, uno de los temas internacionales más sonados ha sido la disputa comercial entre Estados Unidos y China, de la que forma parte medular el veto del presidente Donald Trump al gigante chino de las telecomunicaciones Huawei, mismo que en teoría queda levantado después del encuentro sostenido en cumbre del G20 en Osaka, Japón, con lo que las empresas estadounidenses podrán ya hacer negocios con el fabricante chino, aunque sin retirarlo de la lista negra del Departamento del Tesoro.

Caso aparte es el de Irán, país con el que supuestamente no había ya mayores problemas desde el acuerdo signado entre Teherán y las principales potencias mundiales, que contemplaba el regreso de ese país al mercado petrolero mundial, a cambio de dejar de lado su programa nuclear. A todas luces es claro que la agenda global la está acaparando Donald Trump y su peculiar estilo de hacer política, sin hacer política. Abre frentes por todas partes y lejos de acercarse a sus aliados de naciones abiertamente democráticas, lo que hace es fortalecer la amistad con líderes de naciones cuya democracia es cuestionada, por decir lo menos.

En la pasada cumbre del G20, lo vimos en animada charla con el presidente de Rusia, Vladimir Putin, a quien, frente a los cuestionamientos de la prensa por la presunta injerencia rusa en las elecciones presidenciales estadounidenses del 2016, Trump le dijo entre risas que “no se metiera en las elecciones del 2020” donde buscará reelegirse, algo que de ninguna forma le fue tomado a bien dentro de su propio país.

No hay que perder de vista a Europa, pues viene una importante sucesión de liderazgos en los meses y años por venir, algo que ya se puede ver en la canciller alemana, Angela Merkel, quien, tras largos años en el poder, luce ya desgastada política y físicamente, al detectársele temblores en las manos en sus más recientes apariciones públicas.

Por otra parte, en Francia el liderazgo del presidente Emmanuel Macron, se desgasta entre protestas instigadas por la derecha, mientras que crece el liderazgo de Marine Le Pen, quien bien podría sucederle en la Jefatura de Estado.

¿Y Europa apá?

FB: YolandaDeLaTorreV

@Yoladelatorre

Acompáñenme a hacer un repaso por el mundo informativamente hablando. En los días y/o semanas recientes, uno de los temas internacionales más sonados ha sido la disputa comercial entre Estados Unidos y China, de la que forma parte medular el veto del presidente Donald Trump al gigante chino de las telecomunicaciones Huawei, mismo que en teoría queda levantado después del encuentro sostenido en cumbre del G20 en Osaka, Japón, con lo que las empresas estadounidenses podrán ya hacer negocios con el fabricante chino, aunque sin retirarlo de la lista negra del Departamento del Tesoro.

Caso aparte es el de Irán, país con el que supuestamente no había ya mayores problemas desde el acuerdo signado entre Teherán y las principales potencias mundiales, que contemplaba el regreso de ese país al mercado petrolero mundial, a cambio de dejar de lado su programa nuclear. A todas luces es claro que la agenda global la está acaparando Donald Trump y su peculiar estilo de hacer política, sin hacer política. Abre frentes por todas partes y lejos de acercarse a sus aliados de naciones abiertamente democráticas, lo que hace es fortalecer la amistad con líderes de naciones cuya democracia es cuestionada, por decir lo menos.

En la pasada cumbre del G20, lo vimos en animada charla con el presidente de Rusia, Vladimir Putin, a quien, frente a los cuestionamientos de la prensa por la presunta injerencia rusa en las elecciones presidenciales estadounidenses del 2016, Trump le dijo entre risas que “no se metiera en las elecciones del 2020” donde buscará reelegirse, algo que de ninguna forma le fue tomado a bien dentro de su propio país.

No hay que perder de vista a Europa, pues viene una importante sucesión de liderazgos en los meses y años por venir, algo que ya se puede ver en la canciller alemana, Angela Merkel, quien, tras largos años en el poder, luce ya desgastada política y físicamente, al detectársele temblores en las manos en sus más recientes apariciones públicas.

Por otra parte, en Francia el liderazgo del presidente Emmanuel Macron, se desgasta entre protestas instigadas por la derecha, mientras que crece el liderazgo de Marine Le Pen, quien bien podría sucederle en la Jefatura de Estado.

¿Y Europa apá?

FB: YolandaDeLaTorreV

@Yoladelatorre