En cada gala de los Oscar, las celebridades deben estar prevenidas para un cambio de look con el que deben brillar tanto en la ceremonia principal de entrega de premios, como en la fiesta posterior que como ya es costumbre, realiza la revista Vanity Fair como parte de un reconocimiento a los ganadores de la noche.
Entre los cambios de imagen que saltaron a la vista en este evento, fue el de Kristen Stewart, quien después de su look un tanto desenfadado compuesto de short y saco con el que caminó por la alfombra roja, decidió optar por el encaje y la transparencia de un vestido largo para la fiesta de Vanity Fair.
De las triunfadoras de la noche encabeza la lista Jessica Chastain quien después de recibir el Oscar como Mejor actriz enfundada en un Gucci de lentejuelas, optó por un verde drapeado de textura metalizada de la misma firma.
A esta celebración no pueden faltar las consentidas de la revista anfitriona quienes siempre son protagonistas de su contenido de estilo de vida. Se trata de las Kardashian, quienes estuvieron representadas por Kim y Kourtney, la primera llegó sola enfundada en un vestido azul eléctrico que como ya es costumbre, estaba ceñido al cuerpo resaltando su silueta.
Kourtney, optó por un estilo más clásico pero que en opinión de los expertos, fue un diseño poco afortunado. Se trató de un vestido nude con aplicaciones de encaje y tiras plateadas.
Zoë Kravitz eligió el blanco, opción poco vista entre las celebridades en la noche del cine. Se trató de una gala minimalista de manga larga y cuello alto de Saint Laurent.
Entre los caballeros como era de esperarse, Timothee Chalamet impuso tendencia con un atuendo de americana de pailletes negra sin camisa y pantalón en color negro. El actor siempre ha sido fiel a Valentino.
Otros también llamaron la atención por el look alternativo y relajado sin perder el tono chic como lo hizo Travis Barker, pareja de Kourtney Kardashian. Pero la elegancia masculina se hizo presente con el atuendo de Andrew Garfield con un traje de terciopelo color vino.
Paris Jackson, la hija de Michael Jackson a su vez, captó la mirada de los presentes y de la prensa de moda al lucir un vestido drapeado café con volumen arriba y falda recogida asimétrica abombada que dejó al descubierto sus zapatos color vino.
Deslumbrante y llena de sensualidad fue como se describe el look de Kendall Jenner quien portó una gala de gran volumen y tul en negro. Nunca se quitó las gafas oscuras.
Otra de las reinas de la moda internacional, la modelo brasileña Alessandra Ambrosio lució piernas con un body y falda de gasa con una chaqueta brillante en seda con volumen. Su collar de brillantes se convirtió en uno de los protagonistas de la noche.
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