Sobrellevar los celos entre hermanos es clave, sobre todo en días en que pueden estar pasando más tiempo juntos, por las diferencias de carácter a la larga pueden existir rencillas, y el buen desarrollo de las relaciones personales es algo fundamental.
De acuerdo con Kid City, entre hermanos desarrollamos nuestra primera interacción con el mundo social, en la que convivimos con alguien nuevo y nos adaptamos a él, entendemos que las necesidades y gustos son diferentes a las nuestras y eso nos ayuda a desarrollar habilidades sociales para sus futuras relaciones.
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"Mantener una sana relación entre hermanos, sin importar la diferencia de edades, es primordial, además de contar con una relación de entendimiento, igualdad, calma y respeto, pues es la única manera de integrar una sana convivencia entre ellos; los padres pueden apoyarlos marcando sanos límites en ambos", contextualizó.
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Aspectos para evitar los celos entre hermanos
Para una eficiente gestión de los celos entre hermanos y mejorar su interacción, se sugieren estos aspectos:
1.- Mi hermano mayor, mi maestro. Involúcralos en una serie de actividades diarias sencillas como poner la mesa o hacer la cama y que el hermano mayor le enseñe al menor cómo hacerlo.
2.- Reconoce la personalidad de cada uno. Es importante alentar y reconocer la forma de ser cada uno, así como las semejanzas que existentes entre ellos, de esta manera se puede fortalecer la seguridad en sí mismos, ya que el verse reflejados puede servirles para autodisciplinarse imitando la conducta del hermano mayor o corrigiendo lo que no le gusta sin perder su propia personalidad.
Dedica un día a la semana en familia para que expresen lo que más admiran el uno del otro.
3.- Yo soy yo. No todos los hermanos reaccionan del mismo modo ante una misma situación; no siempre tienen ni los mismos puntos de vista, ni los mismos intereses. Partiendo de este enfoque, el contacto entre ellos resulta muy benéfico porque ofrece a cada uno las posibilidades de desarrollar su individualidad.
Cuando exista un conflicto, por ejemplo, por un juguete, tranquilízalos y permite que cada uno exponga la situación y su posible solución; los papás serán mediadores y solo deberán hacer las observaciones que sean necesarias al respecto, como la importancia de compartir y divertirse juntos, lograr que ellos mismos lleguen a un acuerdo en común tomando en cuenta el punto de vista de cada uno dará como resultado una sana convivencia.
4.- Trabajo en equipo. Estimula y reconoce las habilidades de cada uno como un atributo complementario para lograr objetivos en común, esto desarrollará en ellos una complicidad positiva que se puede transformar en un gran apoyo para la edad adulta fomentando una relación increíble para toda la vida.
Incluso se pueden asignar diferentes actividades en equipo, por ejemplo, ordenar su habitación, antes de dar esta indicación es recomendable sostener una plática con ellos en la que expresen sus ideas de cómo cumplir esta actividad y qué es lo que va aportar cada uno.
Oriéntalos si ves que les cuesta un poco de trabajo, pónganse de acuerdo con la finalidad de que cada uno tenga un rol diferente, es decir, uno que recoja la ropa sucia y el otro hará lo mismo pero con los juguetes o quizás entre los dos pueden acomodar las camas. Una vez organizados deja que ellos ejecuten a su ritmo cada actividad, al finalizar es importante que les reconozcas los logros obtenidos gracias al trabajo en equipo.
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