Brisa Leticia Arenas Rios
En algún tiempo fue considerada como una ciudad modelo, debido a la forma exacta en que están trazadas sus calles, aunque debido al crecimiento de la población, las zonas nuevas de urbanización no poseen las mismas características que tienen las vías céntricas.
El municipio está integrado por una cabecera (Apizaco) y siete comunidades o presidencias auxiliares (Cerrito de Guadalupe, Guadalupe Texcalac, Morelos, Santa Anita Huiloac, San Isidro Apizaquito, San Luis Apizaquito y Santa María Texcalac).
La presencia humana en Apizaco se remonta a los albores de la civilización, pues se han encontrado vestigios de cazadores nómadas que datan de 10,000 a 12,000 años atrás.
Los inicios de la Ciudad de Apizaco fueron aproximadamente en el año de 1866, como un campamento ferrocarrilero, ya que en esos tiempos se empezaron a colocar las vías del tren en la ruta Ciudad de México a Veracruz, por lo que varias personas del campamento se empezaron a establecer en ese lugar, formando así esta bella ciudad llena de historia.
Durante la Revolución Mexicana, para ser más exactos el 8 de mayo del año 1920, un convoy de civiles y militares se detuvo en esta ciudad, descendiendo el entonces Presidente Venustiano Carranza, quien junto con varios generales pasó revista a cerca de tres mil hombres leales.
El convoy había salido y pretendía llegar al puerto de Veracruz, días más tarde el Presidente Carranza fue asesinado en San Antonio Tlaxcalantongo, Puebla, por fuerzas del general Rodolfo Herrero.
Dejando atrás la historia, le mencionaré de algunos atractivos turísticos que tiene esta ciudad ferrocarrilera: la fiesta brava es una tradición en Apizaco y sus alrededores, dada la gran cantidad de ganaderías que se encuentran en el estado. Ha sido muy importante en la aportación de toreros como Rafael Ortega, Rodolfo Rodríguez “El Pana”, José Luis Angelino y una innumerable lista de novilleros; la plaza de toros se ha engalanado con toreros y rejoneadores con reconocimiento a nivel internacional como Eloy Cavazos y Pablo Hermoso de Mendoza.
Otra atracción es la locomotora de vapor 212, conocida como “La Maquinita”, que se encuentra instalada en la glorieta de la Calle 16 de Septiembre; fue una donación de la empresa Ferrocarriles de México para ser el monumento emblemático de la ciudad.
Además de ser un pueblo ferrocarrilero, Apizaco tiene muchas tradiciones y una de ellas es su Feria Apizaco 2017, que se lleva a cabo del 1º. y hasta el 18 de marzo, en ella encontrará eventos taurinos, expo comercial y ganadera, bailes populares, el teatro del pueblo, torneos deportivos, actividades religiosas y danzas populares.
No se pierda la máxima fiesta de esta región, disfrute con toda la familia, ya que esta ciudad se viste de gala para recibirlo con los brazos abiertos.
¿Cómo llegar?
Línea de autobús: Atah.
Terminal: TAPO.
Precio: $144.00.
Precios sujetos a cambio sin previo aviso.