/ martes 30 de noviembre de 2021

Descubren ofrenda mexica del Siglo XVI cerca de Plaza Garibaldi

Especialistas del INAH indicaron que en la vivienda donde se encontraron los objetos, se realizó un ritual en el siglo XVI

Los restos de una vivienda que perteneció al barrio menor de Tezcatzonco fueron hallados por especialistas en un predio del Eje Central, cerca de Plaza Garibaldi; en el lugar hay objetos como una olla con restos óseos y 13 sahumadores, informa la Secretaría de Cultura en un comunicado.

➡️ Paul Auster rescata vida de escritor olvidado Stephen Crane

Un equipo de salvamento arqueológico del Instituto Nacional de Antropología e Historia ( INAH), reporta que en esa .vivienda, "se realizó un ritual en el siglo XVI, posiblemente entre los años 1521 y 1610 d.C., para dar testimonio de que así terminaba un ciclo de sus vidas y de su civilización", detalla el texto.

Entre las piezas encontradas, destacan una olla con cenizas humanas y 13 sahumadores polícromos de casi un metro de longitud, usados para quemar la resina.

La ofrenda, localizada a poco más de cuatro metros de profundidad, estaba recubierta con varias capas de adobes bien consolidados para mantenerla fuera de miradas ajenas, señala Mara Becerra, coordinadora de estas tareas de rescate arqueológico.

De acuerdo con el comunicado, tras el reporte del Instituto de Vivienda de la Ciudad de México ( INVI) ante la Dirección de Salvamento Arqueológico ( DSA) del INAH, el equipo acudió en septiembre al lugar y a lo largo de tres meses realizaron excavaciones arqueológicas en la parte media del terreno, las cuales ya concluyeron.

"Los cimientos del complejo habitacional mexica se encontraron en la parte media del predio de 500 metros cuadrados de extensión, donde el proyecto constructivo del INVI preveía una cimentación profunda y la instalación de un par de cisternas. Un sondeo arrojó el potencial arqueológico del espacio y así, a profundidades que van de 3.50 m 5.20 metros, fueron descubriéndose los vestigios a base de tezontles y adobes, en una superficie aproximada de 80 metros cuadrados".

➡️ I NAH denuncia subasta de piezas arqueológicas en EU ante la FGR

La arqueóloga Mara Becerra precisa que esta residencia fue motivo de modificaciones espaciales y arquitectónicas en al menos dos etapas: en el periodo Posclásico Tardío, entre 1325 y 1521 d.C., y en la ocupación española, entre 1521 a 1610 d.C. Evidencias materiales como omichicahuaztlis (instrumentos musicales de hueso trabajado), flautas y ocarinas, señalan que ahí tuvieron lugar diversos rituales.

La ofrenda confirma el carácter sagrado de Cuepopan-Tlaquechiuhca, aledaño a Tlatelolco. "Por ejemplo, de este lugar procedía el sacerdote que encendía el fuego nuevo cada 52 años en el santuario del Huizachtépetl (Cerro de la Estrella), momento que marcaba el desenlace y la inauguración de un ciclo de la vida", refiere la especialista.

Entre los restos óseos cremados —una costumbre funeraria extendida en el mundo mesoamericano—, posiblemente se encuentran restos de un infante; "sin embargo, esto habrá de comprobarse mediante la microexcavación de las cenizas", advierte el informe.

El significado

De acuerdo con la arqueóloga Mara Becerra los 13 sahumadores expresan un simbolismo particular, ya que fueron dispuestos en dos niveles y en dos orientaciones distintas: unos en sentido este-oeste, y otros en dirección norte-sur, "como una evocación de las 20 trecenas que conformaban el tonalpohualli, el calendario ritual mexica de 260 días; cabe mencionar que el número 13 aludía a los niveles del cielo".

Las características de estos sahumadores refuerzan la concepción nahua del universo, explica. "La cruz calada de las cazoletas representa el quincunce, símbolo del axis mundi; los mangos huecos en colores rojo, negro y azul —que servían de instrumento de viento—, y su remate con la representación de la cabeza de una serpiente de agua, remiten a las fuerzas del inframundo”.

➡️ Suscríbete a nuestro Newsletter y recibe las notas más relevantes en tu correo

Respecto a su temporalidad, concluye la experta que por los tipos cerámicos hallados se asocia a los periodos de contacto español y virreinal temprano, “nos permite interpretar este contexto arqueológico como evidencias de una ofrenda que se dispuso en las primeras décadas tras la conquista de Tenochtitlan, como parte de un ritual de clausura del mismo espacio, un acto esencial para la cosmovisión tenochca".



ESCUCHA EL PODCAST ⬇️

Disponible en: Acast, Spotify, Apple Podcasts, Google Podcasts, Deezer y Amazon Music

Los restos de una vivienda que perteneció al barrio menor de Tezcatzonco fueron hallados por especialistas en un predio del Eje Central, cerca de Plaza Garibaldi; en el lugar hay objetos como una olla con restos óseos y 13 sahumadores, informa la Secretaría de Cultura en un comunicado.

➡️ Paul Auster rescata vida de escritor olvidado Stephen Crane

Un equipo de salvamento arqueológico del Instituto Nacional de Antropología e Historia ( INAH), reporta que en esa .vivienda, "se realizó un ritual en el siglo XVI, posiblemente entre los años 1521 y 1610 d.C., para dar testimonio de que así terminaba un ciclo de sus vidas y de su civilización", detalla el texto.

Entre las piezas encontradas, destacan una olla con cenizas humanas y 13 sahumadores polícromos de casi un metro de longitud, usados para quemar la resina.

La ofrenda, localizada a poco más de cuatro metros de profundidad, estaba recubierta con varias capas de adobes bien consolidados para mantenerla fuera de miradas ajenas, señala Mara Becerra, coordinadora de estas tareas de rescate arqueológico.

De acuerdo con el comunicado, tras el reporte del Instituto de Vivienda de la Ciudad de México ( INVI) ante la Dirección de Salvamento Arqueológico ( DSA) del INAH, el equipo acudió en septiembre al lugar y a lo largo de tres meses realizaron excavaciones arqueológicas en la parte media del terreno, las cuales ya concluyeron.

"Los cimientos del complejo habitacional mexica se encontraron en la parte media del predio de 500 metros cuadrados de extensión, donde el proyecto constructivo del INVI preveía una cimentación profunda y la instalación de un par de cisternas. Un sondeo arrojó el potencial arqueológico del espacio y así, a profundidades que van de 3.50 m 5.20 metros, fueron descubriéndose los vestigios a base de tezontles y adobes, en una superficie aproximada de 80 metros cuadrados".

➡️ I NAH denuncia subasta de piezas arqueológicas en EU ante la FGR

La arqueóloga Mara Becerra precisa que esta residencia fue motivo de modificaciones espaciales y arquitectónicas en al menos dos etapas: en el periodo Posclásico Tardío, entre 1325 y 1521 d.C., y en la ocupación española, entre 1521 a 1610 d.C. Evidencias materiales como omichicahuaztlis (instrumentos musicales de hueso trabajado), flautas y ocarinas, señalan que ahí tuvieron lugar diversos rituales.

La ofrenda confirma el carácter sagrado de Cuepopan-Tlaquechiuhca, aledaño a Tlatelolco. "Por ejemplo, de este lugar procedía el sacerdote que encendía el fuego nuevo cada 52 años en el santuario del Huizachtépetl (Cerro de la Estrella), momento que marcaba el desenlace y la inauguración de un ciclo de la vida", refiere la especialista.

Entre los restos óseos cremados —una costumbre funeraria extendida en el mundo mesoamericano—, posiblemente se encuentran restos de un infante; "sin embargo, esto habrá de comprobarse mediante la microexcavación de las cenizas", advierte el informe.

El significado

De acuerdo con la arqueóloga Mara Becerra los 13 sahumadores expresan un simbolismo particular, ya que fueron dispuestos en dos niveles y en dos orientaciones distintas: unos en sentido este-oeste, y otros en dirección norte-sur, "como una evocación de las 20 trecenas que conformaban el tonalpohualli, el calendario ritual mexica de 260 días; cabe mencionar que el número 13 aludía a los niveles del cielo".

Las características de estos sahumadores refuerzan la concepción nahua del universo, explica. "La cruz calada de las cazoletas representa el quincunce, símbolo del axis mundi; los mangos huecos en colores rojo, negro y azul —que servían de instrumento de viento—, y su remate con la representación de la cabeza de una serpiente de agua, remiten a las fuerzas del inframundo”.

➡️ Suscríbete a nuestro Newsletter y recibe las notas más relevantes en tu correo

Respecto a su temporalidad, concluye la experta que por los tipos cerámicos hallados se asocia a los periodos de contacto español y virreinal temprano, “nos permite interpretar este contexto arqueológico como evidencias de una ofrenda que se dispuso en las primeras décadas tras la conquista de Tenochtitlan, como parte de un ritual de clausura del mismo espacio, un acto esencial para la cosmovisión tenochca".



ESCUCHA EL PODCAST ⬇️

Disponible en: Acast, Spotify, Apple Podcasts, Google Podcasts, Deezer y Amazon Music

Sociedad

La reforma de pensiones no es para perjudicar a los trabajadores, afirma AMLO

AMLO negó que la reforma sea perjudicial para los trabajadores y remarcó que es para que se logren pensiones dignas

Sociedad

Marina da contratos a 2 empresas opacas

Ambas compañías tienen diferente razón social, pero el mismo domicilio fiscal

Metrópoli

Apuestan en CDMX a vivienda vertical

El nuevo encargado de despacho del IPDP explica que la poca oferta en materia de vivienda se traduce en altos costos de rentas y de adquisición

Mundo

No hubo ataque con misiles contra Irán, dice funcionario iraní a Reuters

No obstante, la versión de EU afirma que sí se trato de ataque contra la provincia de Isfahán

Finanzas

Nearshoring dará 1.7% al PIB de México

Para este avance se debe impulsar la formalización de la economía y el T-MEC, dijo el presidente de la ABM

Finanzas

México bloquea apoyos a China

Armadoras del país asiático han pedido al gobierno flexibilidad en impuestos para construir plantas, pero no lo han logrado