Este sábado, se dio a conocer la muerte de luchadora social, pionera en la búsqueda de desaparecidos en México y primera mujer en competir por la presidencia de la República, Rosario Ibarra de Piedra.
Tras darse el anuncio de su fallecimiento, el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador lamentó la perdida, y destacó que era una mujer que siempre nos recordará el amor a los hijos.
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Sin embargo, en el mensaje que compartió el mandatario, este hizo referencia a un personaje italiano, y catalogó a la activista como su admiradora.
“Ese era su verdadero partido aun cuando admiraba a Giordano Bruno”, escribió el presidente.
¿Quién es Giordano Bruno?
Giordano Bruno es un reconocido filósofo del renacimiento que nació en la localidad de Nola (Nápoles) en 1548.
Bruno durante su juventud estaba destinado a dedicarse de fraile y profesor de teología, pero la curiosidad hizo que comenzara a leer muchas corrientes de la época, sobre todo en la literatura científica.
Dentro de sus materias, se le reconoce el estudio y divulgación de la teología, la astronomía, y por supuesto, la filosofía, abarcando temas como la religión y la física, y hasta por la magia.
En la teología, Giordano defendió el panteísmo, una corriente filosófica que establece que la deidad, la naturaleza y el universo son lo mismo o equivalentes, es decir, que no se cree específicamente en la entidad divina llamada Dios.
Para 1575, el italiano fue acusado de herejía, lo que le costó durante cuatro años ser perseguido por la inquisición.
Entre las razones por las que fue detenido y perseguido, se especula que está relacionada con sus afirmaciones en el sentido de que Jesús no tenía cuerpo físico y que su presencia física era solo una ilusión.
Cuando fue interrogado, Giordano Bruno explicó que sus obras eran filosóficas y en ellas sólo sostenía que:
"El pensamiento debería ser libre de investigar con tal de que no dispute la autoridad divina".
Pese a declararse cristiano, Giordano creyó en la libertad de pensar. Fue un mártir de la modernidad que nunca mostró temor por los aires de la divulgación científica.
Y será recordado por alguien que siempre enfrento a la autoridad que no permite la libertad de expresión.
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Esta analogía de luchar contra la libertad de expresión sirvió para recordar y lamentar el fallecimiento de Rosario Ibarra de Piedra.