Por Raúl García
Zacatecas, Zac.- No sólo debe vigilarse el deterioro de la Catedral, sino también el de otros edificios como el templo de Santo Domingo debido a la inestabilidad del subsuelo en el que están construidos, alertó Rafael Sánchez Preza; presidente de la Junta de Protección a Monumentos y Zonas Típicas del Estado.
Aunque aclaró que el daño no ha llegado a un nivel crítico, mencionó que a simple vista ya se notan algunas fracturas en los arranques de la torre sur y sobre todo un desplome de la misma.
En entrevista advirtió que otro elemento sensible de la catedral es el tambor de luces en la cúpula principal que también en fecha recientes presentó fracturas.
En el caso de Santo Domingo, reconoció que a pesar de los trabajos intensivos de rescate realizados en años pasados, permanece el riesgo de desplazamiento.
Adelantó que recomendará instalar una mesa de trabajo permanente con el INAH, la Diócesis de Zacatecas, Secretaría de Infraestructura y el ayuntamiento, para elaborar un protocolo de acción multianual, preventiva y correctiva, para la catedral.
Recordó que en el 2014 una empresa especializada en mecánica de suelos del estado de Querétaro y geólogos de la UAZ, realizaron un estudio del subsuelo con geo radar para conocer las condiciones del subsuelo, lo que confirmó la inestabilidad del mismo.
SONIDO Y VIBRACIONES MALIGNAS
Sánchez Preza anunció que, dependiendo de la suficiencia presupuestal, en los meses de julio y agosto se efectuará un estudio para medir el daño que provoca el ruido en la catedral y en los edificios cercanos.
El resultado permitirá conocer cuántos son los límites de decibeles permisibles en los eventos públicos que tienen lugar en la Plaza de Armas.
Otro aspecto que vulnera a los templos y otras fincas es la vibración producida por el paso de los vehículos.
Informó que la diócesis, el ayuntamiento y otras dependencias también participan en la elaboración del reglamento para las plazas de la ciudad, documento que restringirá determinados eventos de acuerdo al uso de equipos de sonido y a la cantidad máxima permitida de asistentes.
Dicho reglamento municipal -dijo- debe estar listo antes de que concluyan las administraciones municipales y estatal.
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