POR ROBERTO RONDERO | El Sol de México
Elsa tiene treinta años y adora la montaña. Pero, precisamente a causa de esta pasión, ha caído de una pared helada y ahora yace en una cama de hospital. Hace veinte semanas que está en coma. Aunque ella oye todo, ninguna de las personas que la rodean parece darse cuenta, así transcurre “Sé que estás aquí” (Ediciones BN, 225 páginas), la primera novela escrita por la francesa Clélie Avit, graduada como profesora de fisicoquímica y quien obtuviera el año pasado el Premio Nuevo Talento de la Fundación Bouygues Telecom.
En “Sé que estás aquí” un día, un joven desconocido entra en la habitación de Elsa por error. Thibault no sabe nada de la historia de Elsa, pero empieza a hablar con ella y conoce a sus amigos. Y algo en esa joven dormida, que huele a jazmín y tiene un aspecto muy dulce, lo atrae como un imán a su habitación.
-“Estoy en coma”
“Tengo frío. Tengo hambre. Tengo miedo. Al menos eso creo.
“Hace veinte semanas que estoy en coma e imagino que debo de tener frío, hambre y miedo. Parece absurdo, porque si alguien debe saber lo que experimento, sin duda ese alguien soy yo, pero ahora… solo puedo imaginarlo.
“Sé que estoy en coma porque los he oído hablar de ello. Vagamente. Debe de hacer unas seis semanas que ‘oí’ por primera vez. Si he contado bien”.
Entrelíneas, “Sé que estás aquí” es un relato a una sola voz, desesperante, agónico, un llamado de rescate a un mundo exterior que no se inmuta ante el cuerpo inerte, aparentemente desconectado.
“Hace seis semanas que estoy despierta. Hace seis semanas que nadie se da cuenta. De todos modos, no van a someterme a un TAC las veinticuatro horas del día. Si el sensor que hace “bip” a mi lado, no ha querido mostrar que mi cerebro es de nuevo capaz de hacer funcionar su zona auditiva, no van a arriesgarse a introducir mi cabeza en el escáner por un coste de ochocientos mil euros.
“Todos me creen desahuciada. Hasta mis padres empiezan a rendirse. Mi madre ya no viene tan a menudo. Y al parecer, mi padre lo dejó al cabo de diez días. Solo mi hermana pequeña acude con regularidad todos los miércoles, en ocasiones acompañada de su pareja de turno”.
En la trama de “Sé que estás aquí” Thibault no sabe que Elsa no volverá a despertar, porque en breve la desconectarán de las máquinas que la mantienen con vida. Los médicos así lo han decidido, y la familia ha aceptado. Todos piensan que es imposible que Elsa despierte. No obstante, cada vez Thibault entra en la habitación, ella siente que se le acelera el corazón…
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