Trabajadores de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México rechazaron participar como “voluntarios” para aplicar pruebas Covid-19 en los macro kioscos de la capital del país, como les fue solicitado en un documento interno firmado por Benjamín González Pérez, director general de Vinculación Cultural Comunitaria de esta institución.
Los empleados que participan en la Red de Faros de la CDMX, promotores culturales, miembros de los Talleres de Artes y Oficios Comunitarios TAOC, entre otros, fueron informados en el oficio que desde hace algunas semanas “compañeros y compañeras de la Secretaría de Cultura colaboramos en la implementación de filtros en el centro histórico y más recientemente en la organización de los macro kioskos, en donde se aplican pruebas rápidas”.
Trascendió que en el documento se solicita a la Secretaría de Cultura de la CDMX “redoblar esfuerzos para dichas labores”, por lo que pide el "apoyo y solidaridad” de los trabajadores de esta institución.
Se lee en el oficio que “durante el mes de diciembre todas las personas que formamos parte de los programas de Cultura Comunitaria, incluyendo las direcciones, subdirecciones y coordinaciones, estaremos acudiendo a colaborar en las actividades mencionadas anteriormente. Las áreas a cargo de la operación y seguimiento de los programas les informarán cómo será la nueva participación”.
Ante esto, en una respuesta por escrito, galeristas, promotores, colectivos, personal de nómina 8 y honorarios exigieron un trato digno para los trabajadores de la cultura en la Ciudad de México y rechazaron participar en estas actividades debido a que “no somos personal capacitado para ejercer estas acciones sanitarias”.
Destacaron que no cuentan con servicio médico “como trabajadores y becarios de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México. No existen medidas de protección reales para nosotros ni nuestras familias ate un posible contagio en los kioscos y filtros”.
Manifestaron su temor a represalias ante esta negativa, debido “la precarización de los agentes culturales de la CDMX, el temor ante los recortes presupuestales, la ausencia de certeza sobre la continuidad de nuestras contrataciones o apoyos para el 2021”.
Los firmantes expresaron: “No toleraremos represalias como despidos injustificados y rescisión de apoyo”, por su negativa a cumplir esta instrucción.
El gobierno capitalino colocó 50 macro kioskos para aplicar pruebas rápidas de Covid-19 en diversas explanadas de las alcaldías de la Ciudad de México, a las afueras de estaciones del Metro y puntos de mayor afluencia en la capital. El objetivo, dijo el gobierno el 1 de diciembre, es “aplicar 20 mil pruebas diarias para detectar casos positivos de la enfermedad”.
La jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, anunció este viernes que la Ciudad de México se encuentra con el semáforo epidemiológico en naranja con “alerta al límite”, luego de un repunte de contagios de Covid-19 en la capital. Tan sólo el 4 de diciembre se registraron 4 mil 826 nuevos casos confirmados acumulados.