La tripulación mexicana conformada por Pedro de Uriarte yEduardo Vanzzini, al mando de una camioneta Ford Cruiser demanufactura belga, cumplieron este día con los requisitosadministrativos y de inspección técnica obligatorios para podertomar la arrancada de lo que será la sexta edición del Silk WayRally (Rally Ruta de la Seda). Competencia por demás sui generisque recorrerá 10,774 kilómetros de desierto y diversos caminosentre las ciudades de Moscú y Beijing.
Desde muy temprano, los dos connacionales iniciaron susactividades en la ciudad capital de Rusia sosteniendo diferentesreuniones de logística con parte del equipo de ingenieros ymecánicos que les darán apoyo a lo largo de la ruta. En dichastertulias, se afinaron los últimos detalles de la complicadalogística que implica un evento con características tanespeciales como lo son dieciséis días de duración, el cruce portres países, el paso por zonas en conflicto bélico y con unatemperatura tan variante que de un día a otro que puede cambiardesde los 40 grados centígrados hasta los 20 grados bajo cero.
Una vez detallado el procedimiento a seguir, el equipo BastionHotels Dakar Team, en el cual compiten De Uriarte y Vanzzini, setrasladó en su totalidad a la Plaza Roja para pasar la camionetacon el 169 como número de competencia y que lleva los colores deMéxico por la inspección técnica. En ella, los encargados de laseguridad del rally revisaron al cien por ciento la unidad paraverificar que cumpliera con lo establecido por el reglamento.Trámite que, sobra decirlo, la tripulación azteca cumplió entoda su magnitud.