París, 27 Sep.- Un gol del polaco Kamil Glik, cuando el relojhabía escupido ya 94 minutos de juego, permitió al Mónacoarrancar en su estadio un empate que no mereció por juego yocasiones frente a un Bayer Leverkusen que se había adelantadogracias a un tanto del mexicano Javier "Chicharito" Hernández.
Desde lejos, un balón perdido y sin historia que parecíadestinado a ser el último suspiro de un encuentro en el que losgermanos fueron mejores, el gran central polaco ofreció a losmonegascos una volea que se coló en la escuadra de Leno.
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Injusto castigo para un Bayer que había atacado más, puestomás leña en el asador y buscado con más fe la meta los locales yque se frotaba las manos con los tres puntos desde que "Chicharito"lograra en el minuto 73 el tanto que parecía dar premio a susesfuerzos.
Con ese punto, los monegascos se sitúan en la primera plaza delgrupo E empatados con el CSKA de Moscú y pone contra las cuerdasel futuro europeo de los germanos.
Fue el colofón a un partido en el que los de Roger Schmidttuvieron el dominio territorial y relegaron a los monegascos a unpapel secundario, muy lejos del área alemana, incapaces de crearpeligro.
Se jactaban los del Principado de su buen hacer contra elLeverkusen en el pasado, mientras que los farmacéuticos se lamíanlas heridas de hace dos años, cuando pese a que fueron mejores semarcharon con dos derrotas en la fase previa de la Liga deCampeones.
El Bayer dominaba pero apenas inquietaba la portería delMónaco, condenado a defender y esperar que de un golpe de geniodel luso Bernardo Silva, el único capaz de dinamizar algo elataque de los locales.
Los alemanes penaban a encontrar a Chicharito, su principalamenaza ofensiva y así el primer tiempo brilló por la ausencia depeligro.
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Solo en el tramo final cada equipo dispuso de una ocasión. Enel 45 Thomas Lemar disparó desde la frontal del área solo, perosu balón se marchó ligeramente alto. Dos minutos más tarde fueel germano Volland quien al fin encontró a su compañero mexicano,que se internó en el área pero no pudo superar al metaSubasic.
Aceleró el Bayer a la vuelta de las duchas y se achicó aúnmás el Mónaco, confiado en que Chicharito no tuviera sunoche.
Pero el mexicano acabó por aparecer, justo después de que seefectuara un cambio en cada equipo, de que Leonardo Jardim dieraentrada al argentino Carrillo para refrescar su ataque, como siquisiera despertar a su equipo del letargo.
El Bayer recuperó en una mala salida del balón de losmonegascos que permitió a Mehmedi, que acaba de sustituir aVolland, centrar desde la banda para que el menudo Chicharitomarcara de cabeza.
Se estiró el Mónaco pero no hizo temblar la fortaleza delLeverkusen, que sin embargo se dio de bruces con la cruda realidadcuando en el último segundo se encontró con el tanto de Glik.
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