En 2001 BMW aceptó la responsabilidad de mantener vigente al Mini Cooper, de cara al nuevo milenio, manteniendo su característico diseño, pero dotándolo con toda la tecnología disponible. Sin embargo, no todo quedó ahí, la firma alemana ha perfeccionado tanto la fórmula que creó variantes de carrocería muy interesantes dentro de la gama para hacer del Mini un vehículo más versátil.
Prueba de ello es la más reciente actualización del Mini Clubman, un vehículo que toma como base al Mini convencional de 3.82 metros de longitud, pero al que se le han añadido 43.2 centímetros para colocar dos puertas adicionales y de esta forma mejorar la habitabilidad y el espacio interior, tanto para los ocupantes como para su equipaje, pues el volumen de la cajuela pasa de 211 litros del Mini tres puertas a 360 litros en el Clubman.
A la redacción de Autos OEM llegó la versión más radical, aquella que porta con orgullo el apellido John Cooper Works, lo que significa que equipa un paquete deportivo que lo eleva a un nivel de manejo más agresivo, acompañado de una estética más poderosa que respalda el concepto.
De esta forma encontramos un juego de faros LED con diseño Union Jack, una pequeña toma de aire sobre el cofre, así como otro conjunto de ventilaciones ubicado en los extremos inferiores de la fascia, líneas deportivas y un impresionante juego de rines de aluminio de 18 pulgadas, los cuales permiten observar los discos del sistema de frenos.
Al interior, la deportividad del exterior se replica en el habitáculo, con elementos que la subrayan, como los asientos de tipo cubo forrados en piel, el volante con paletas de cambio, así como los modos de manejo Sport, Mid y Green. Nosotros seleccionamos la versión sport (obviamente) y nos pusimos en marcha.
De inmediato se percibe una nota más ronca en el bloque cuatro cilindros de 2.0 litros turbocargado, sus 306 caballos de fuerza son una clara advertencia de que, aunque se trata de un vehículo pequeño, se debe tomar en serio.
El momento de acelerar llegó y a pesar de que el auto no es tan ligero (1,625 kilogramos) el empuje es sorprendente: las 206 libras-pie de torque que el propulsor genera aparecen desde el 1,350 rpm, tu espalda se adhiere al respaldo del asiento sin compasión; estas cifras son las que le permiten al Clubman acelerar de cero a 100 km/h en 4.9 segundos.
Con la transmisión en modo manual, es posible realizar uno a uno los 8 cambios disponibles por media de las paletas detrás del volante, algo que nos encanta pues podemos aprovechar el motor al máximo y disfrutar de un petardeo con cada nueva inserción.
Sin embargo, si se requiere mayor precisión en esta tarea, por eso lo mejor es dejar que la caja de velocidades haga el trabajo por nosotros, su respuesta es afinada y toma la mejor decisión al momento de elegir el cambio adecuado.
Al tratarse de una versión deportiva, tanto el esquema de suspensión como la dirección tienden a ser más rígidas, algo que no siempre resulta cómodo en asfalto maltratado como el que las vialidades de la Ciudad de México presumen.
Lo que sí es un hecho es que el Clubman tomó la receta del Mini de tres puertas y la mejoró, para crear un vehículo con una estética atractiva y bien proporcionada, un mayor espacio interior y con el paquete John Cooper Works, ofrece un manejo completamente deportivo.
FICHA TÉCNICA
- Motor 4 cilindros 2.0L
- Potencia 306 Hp
- Torque 206 Lb-pie
- Transmisión Steptronic deportiva 8 vel.
Precio desde $830,000
Destacados
- 4.9s acelera de 0-100 km/h
- 3 modos de manejo : Sport, Mid y Green
