Calor y llamas ardientes esperan a Chivas en su visita de estanoche a Toluca. Cancha que no se le ha dado en los últimos años.Los escarlatas están ansiosos de seguir con la fiesta delCentenario y quieren hacerlo a costa de los rojiblancos, quesufrieron, pero finalmente se instalaron en esta ronda trasdeclararse vencedores del Clásico tapatío.
Los Diablos saben que no pueden repetir una actuación como ladel pasado fin de semana en su casa, por lo que se vislumbra a unequipo rojo más intenso, sin ser lo permisivo que fue ante Santos,lo cual le pudo salir caro, de no ser por la gran actuación deAlfredo Talavera, quien dejó atrás su pasado rojiblanco y seencuentra enfocado en hacer campeón a Toluca.
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Guadalajara está aquí gracias al reglamento. Su mejorposición en la tabla le dio el chance de avanzar y encender másque nunca su anhelo de coronarse, luego de más de 10 años desdela última vez en que se proclamaron campeones, irónicamente, enel inmueble que hoy visitarán.
Sin embargo, el Nemesio Díez no solamente tiene buenosrecuerdos para el Rebaño, también una pesada carga de seis añossin triunfo, ya que desde el Clausura 2011, Chivas no ha podidoganar en la otrora "Bombonera", en donde acumula siete visitas conun saldo de seis derrotas y un empate.
Si bien esta será una serie de 180 minutos, ambos tienen quemodificar desde la ida, para no complicarse en el encuentro deldomingo. Toluca, por ser un mejor local, y Guadalajara, por romperla malaria que lo persigue en la capital mexiquense.
Las puertas del averno están por abrirse. Chivas ha sidollamado a los aposentos del demonio, y aunque de inicio parte comovíctima, tiene la misión de apagar las llamas con buen futbol ypermitir que sus miles de aficionados mantengan el sueño decoronarse.