La Marea Roja se elevó para ahogar a Trinidad y Tobago.
Los canaleros demostraron sus ansias y hambre de un Mundial. Aprovecharon y eliminaron a los isleños de la busca del Mundial. El 3-0 de anoche en el Rommel Fernández acercó a Panamá a su máximo sueño: Rusia 2018.
EL JUEGO
El equipo local buscó con insistencia el gol desde el inicio del encuentro. No le fue fácil abrir a la defensiva trinitaria, que aguantó casi todo el primer tiempo los embates rojos.
En la recta final de la parte inicial, una descolgada individual, llena de velocidad y técnica de Gabriel Torres, terminó con el tanto que abrió el marcador antes del descanso y guió el camino panameño al triunfo. El atacante tiró un sombrerito y un autopase, para después salir a toda velocidad y definir con tranquilidad ante el achique del arquero, dándole así la ventaja a los suyos antes del descanso.
El Rommel Fernández explotó. Estados Unidos dejó puntos en Honduras y la posición en la tabla los favoreció. El descanso llegó con la fiesta panameña en pleno apogeo.
Ya en el complemento, el triunfo de Panamá se consumó; primero un autogol de Deon Mitchell, quien en su intento por cortar la pelota, atacó de forma errónea y la metió en su propia puerta con la cabeza. Eso sepultó anímicamente a Trinidad.
La cereza en el pastel vino cortesía de Abdiel Arroyo. Con un potente disparo desde fuera del área, dejó fuera de toda posibilidad de atajar a Marvin Phillip. La goleada se consumó en la cancha canalera.
El tiempo transcurrió y el local intentó ampliar la ventaja a sabiendas de que la diferencia de goles podría ser definitiva más adelante. La falta de puntería no les permitió
Panamá durmió con boleto en mano. Todo se podrían firmar en casa del rival que les quitó el sueño de Brasil 2014: Estados Unidos. ¡Vaya agarrón!