Los tenistas Roger Federer y Alexander Zverev ya se encuentran en la Plaza de Toros México para disputar el partido de exhibición que marca el regreso del suizo a tierras aztecas tras 23 años.
Antes dieron un paseo en helicóptero por la Ciudad de México y en sus redes sociales expresaron su emoción.
“Quiero conocer a mucha gente y ver qué tan emocionados están para el partido de esta noche”, dijo Federer horas antes.
“Acabo de comer unos huevos rancheros, quiero ver la ciudad y es impresionante”, mencionó.
El helicóptero que trasladó a “Su Majestad” aterrizó en el estadio Azul, para de ahí entrar a la plaza de toros; luego pisó la cancha para delirio de los aficionados que ya se encontraban en la plaza.
Lo mismo hizo el joven tenista alemán, quien acompaña a Roger en esta gira por Latinoamérica que ya los llevó a Argentina, Chile, Colombia y Ecuador.
En la conferencia de prensa, Federer recordó cuando vino a México hace dos décadas: “Hace mucho vine a México como juvenil, pero nunca como tenista profesional”.
“México estaba en la lista de los países que quería visitar. Quería romper el récord de la audiencia más grande que ha tenido un partido de tenis", aseguró.
