La capital de Corea del Norte siguesiendo bastante tranquila comparada con otras grandes ciudades delmundo, pero su hora de máximo congestionamiento ocurre bientemprano y en orden.
La hora pico en Pyongyang esalrededor de las 7 de la mañana, cuando se ven a los peatonescaminando por estrechas aceras o pedaleando sus bicicletas,mientras otros usan los trenes subterráneos, autobuses otranvías.
Ya desde las 6:30 se ven atrabajadores en traje y corbata o en uniformes color verde oliva, ya los estudiantes con sus uniformes de camisa o blusa blanca,pantalón o falda oscuros y bufandas rojas. Se les ve esperando porsu medio de transporte, que usualmente son autobuses o trenesatestados de gente. Los jubilados caminan con sus sillas plegableshasta los ríos Potonggang o Taedonggang para pescar.
Las cuadrillas de limpieza,usualmente gente anciana o alumnos de escuelas primarias, tambiénsalen antes del alba para cortar césped o recoger la basura, queen gran parte consiste en colillas de cigarrillos pues Corea delNorte es uno de los países con mayor índice defumadores.
El horario laboral en esta naciónempieza a eso de las 9 de la mañana. Las clases empiezan una horaantes.
El país asiático se encuentra enmedio de una “Campaña de Lealtad” en que se le pide a laciudadanía esfuerzos adicionales para mostrar su devoción allíder Kim Jong Un y aumentar la productividad laboral. Se ve confrecuencia grupos de mujeres ondeando banderas rojas frente aentradas del tren subterráneo, mientras equipos de sonido a sulado emiten himnos patrióticos.
A veces bandas de música escolareslas acompañan en su ritual, diseñado para animar a la gente a ira trabajar con más ánimo. Y por si fuera poco, en algunos puntoshay camionetas con altoparlantes emitiendo propagandaoficialista.
La “Campaña de Lealtad” debedurar 200 días, y ya se encuentra en el 80mo.
Fue convocada tras un encuentro delpartido oficialista en mayo, para acentuar el apoyo del pueblo alrégimen de Kim, especialmente en señal de apoyo a las víctimasde inundaciones en el norte del país.