En los primeros ocho meses del año, la autoridad fiscal embargó mercancías en las aduanas del país con un valor de 22 mil 663.2 millones de pesos, una cifra récord.
Esa cantidad es casi ocho veces mayor a la reportada en 2018, según datos del Servicio de Administración Tributaria.
Hasta ahora, 2007 había sido el año récord, cuando las mercancías incautadas tuvieron un valor de 13 mil 949.4 millones de pesos. Esa cifra representa 61.5 por ciento de lo decomisado en lo que va de este año.
Consultados al respecto, especialistas en materia aduanera coincidieron en que este incremento se debió a diversos factores como la entrada de una nueva administración que busca recaudar más a través de una política más agresiva del SAT, así como a cambios en la ley aduanera y mayor rigor en la aplicación de algunas Normas Oficiales Mexicanas (NOM) para productos de importación.
Jorge Alberto Lagos Ramón, director del despacho Lagos Ramón y Asociados, explicó que el endurecimiento a las NOM permite al SAT hacer más embargos.
“Si bien ya existían disposiciones de normatividad, hubo algunos ajustes en las NOM para importaciones por parte de la Secretaría de Economía el año pasado que endurecieron la retención de mercancías en las aduanas”, comentó.
De acuerdo con la legislación aduanera, la autoridad fiscal puede realizar embargos precautorios, revisar las mercancías por cinco días y, posteriormente, si no cumple con las líneas de importación o se omite declarar contribuciones, procede a realizar embargos definitivos.
Alberto Méndez, consultor de Comercio Exterior y Aduanas del Consorcio Jurídico Aduanero (CJA), coincidió que en lo que va de la presente administración ha sido más estricto el tema del embargo.
“La autoridad puede embargar por varios supuestos, uno de ellos es que las mercancías estén por debajo de su precio, otro que el domicilio del importador sea falso y uno más es que se incumpla con permisos de importación o con las NOM de la Secretaría de Economía”, recordó.
En ese sentido, dijo que a finales del año pasado se modificó la estructura de algunas NOM en materia artículos de energía y salud, entre otros. Antes, recordó, había beneficios para los importadores. Si llegaban a incumplir con algún requisito de la NOM podían demostrar que la mercancía no se iba a vender y entonces se les permitía el ingreso. Ahora, dijo, esto ya no es posible.
También señaló que hay mayor rigor para incautar productos que están por debajo del precio de la mercancía. Es decir, aquellos productos que pueden ser genéricos y por lo mismo su valor es más bajo, son más propicios a ser embargados.
“La realidad es que el gobierno federal necesita recaudar y el comercio exterior es una vía por donde entran grandes cantidades. Pero también es cierto que en años anteriores los contribuyentes abusaron de normas que eran laxas y ahora se está revirtiendo esto”, concluyó.
Entre diciembre de 2018 y septiembre pasado, la Administración General de Aduanas recaudó 811.77 millones de pesos, un monto siete por ciento mayor al del mismo lapso previo.