La economía mexicana podría terminar el 2022 con una inflación de 7.50 por ciento, de acuerdo con especialistas financieros consultados por el Banco de México (Banxico).
Si se cumple este pronóstico, sería la inflación más elevada para un cierre de año desde el 2000, cuando se alcanzó un nivel de 8.95 por ciento, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
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A través de la “Encuesta sobre las expectativas de los especialistas en economía del sector privado”, a junio de 2022, Banxico dio a conocer que la nueva estimación para la inflación en México es superior al 6.81 por ciento esperado hace un mes.
De igual forma, los expertos consultados coincidieron en que la meta de inflación del banco central, que va del dos al cuatro por ciento, se alcanzará casi a finales de 2023.
Algunos de los riesgos al alza para la inflación, de acuerdo con Banxico, es que continúen los contagios de Covid-19 o se extiendan las presiones geopolíticas entre Rusia y Ucrania durante los próximos meses.
El informe de Banxico, elaborado con 38 grupos de análisis y consultoría económica del sector privado nacional y extranjero, añade que el 2022 también terminará con un crecimiento económico de 1.8 por ciento.
A nivel general, problemas de gobernanza y de inflación son los principales factores que podrían obstaculizar el crecimiento del país en el corto plazo.
Según el consenso de expertos, de manera particular también preocupan problemas de inseguridad pública, más aumentos en el costo de materias primas y la incertidumbre sobre la situación económica local.
Además, el 68 por ciento de los encuestados considera que actualmente la economía está mejor que hace un año, aunque otro 62 por ciento prevé que el clima de negocios permanecerá igual durante el próximo semestre.
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