La Asociación Nacional de Empresas de Rastreo y Protección Vehicular (ANERPV) informó que en mayo pasado se registraron robos a transporte de carga en casi todas las entidades del país, lo que permitió ubicar las rutas más peligrosas para el transporte de carga en todo el país.
Se trata del Circuito Exterior Mexiquense, Arco Norte, Cuautitlán-Tepeji del Río, Guanajuato (Celaya a Salamanca), Puebla-Veracruz (San Martín Texmelucan hasta la Tinaja) y San Luis Potosí en las inmediaciones de Matehuala.
Víctor Manuel Presichi Amador, presidente de ANERPV, sostiene que la evolución de la pandemia en México ha provocado una continua modificación en los hábitos de autoprotección y la dinámica comercial del mercado.
Bajo este contexto, las industrias de la seguridad, específicamente la telemetría, logística y transporte, se han vuelto sectores con mayor protagonismo al paliar contra el robo de mercancías en tránsito.
Si bien sostiene que en mayo se registró a nivel nacional 4% menos en hurtos que el mes anterior, algunas entidades siguen al alza de manera consistente, como Guanajuato.
Sus estadísticas revelan 57 robos a transporte de carga en el Estado de México; Jalisco, 27; Guanajuato, 27; Puebla, 26; Michoacán, 13; Veracruz, 12 y Ciudad de México, 19.
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Para Presichi, abril y mayo fueron cruciales para que los proveedores de servicios, rastreo satelital, empresas transportistas, seguridad privada y gobierno (en sus tres niveles), fortalecieran las alianzas establecidas, se reforzara la coordinación y aplicaran protocolos de prevención, contención, reacción y recuperación de mercancías robadas en tránsito, las cuales ascienden a varios cientos de millones de pesos por delitos frustrados.
Presichi Amador indicó que a la fecha se ha logrado la detención de 84 personas y 12 predios asegurados donde se resguardaban unidades y mercancía robada.
Como empresas de rastreo satelital –aseveró Presichi Amador- no se descarta que en los próximos meses, como parte del regreso a la “nueva normalidad” con una economía del país marcadamente a la baja, se incrementará la demanda de productos básicos a bajo precio como alimentos y bebidas procesados, medicamentos, limpieza e higiene personal, calzado y ropa.
“Es justo ahí, el mercado negro, genera una fuerte demanda de productos robados y apócrifos, lo cual es atendido no sólo por grupos delictivos establecidos, pero también por otras organizaciones que al ver afectada su economía por la caída en otras actividades delictiva, decidan migrar y experimentar en otros delitos como el robo del transporte de mercancía”, advirtió.
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