Aunque los teatros permanecen cerrados por la contingencia del Covid-19, el productor Morris Gilbert no ha dejado de idear proyectos. Entre ellos está su plan de regresar a cartelera la obra ¡Qué Plantón!, uno de los musicales más exitosos de la cartelera mexicana montado en 1989 y 2009.
“Afortunadamente se volvió un icono en el país, y por ahí tenemos planes que tenemos (al respecto), luego les platico”, dijo brevemente Gilbert en una master class que ofreció este viernes, donde recorrió su experiencia de 45 años como productor, donde esta obra ha sido uno de sus grandes éxitos.
El fundador de la compañía Mejor Teatro compartió con el público anécdotas de su trabajo como productor, entre ellas su experiencia para encontrar al elenco ideal en sus obras. “Debes tener muy claro cómo son tus personajes, qué buscas en cada uno de los actores que vas a contratar; el rango de edad, el tipo físico, su rango actoral, tienes que saber bien de qué va la obra, el personaje para buscar a las personas adecuadas”.
Morris compartió que él siempre se encuentra en estado de audición, buscando a los actores ideales para sus montajes. Y recordó que durante varios años realizó la programación del Teatro Hidalgo: “Íbamos a hacer una obra donde necesitábamos a una actriz que por el personaje debía tener mucho pecho. Entonces yo andaba por la calle viéndole los pechos a las señoras y cuando me daba cuenta decía ‘van a creer que soy un degenerado enloquecido’, pero yo estaba buscando a mi actriz en la cabeza”.
Algo similar le ocurrió cuando realizó el montaje de Qué Plantón!, donde “había un personaje que se llamaba el Mango petacón, entonces necesitábamos a un actor que tuviera muy buenas petacas, y ahí andaba yo por la calle viéndole las nalgas a todos los hombres”, record.
En la charla moderada por Mónica Garza, Morris Gilbert recordó que su amor por los musicales surgió gracias a El hombre de la mancha, que posteriormente montó en México con Benny Ibarra como estelar. El productor recordó que ahí quedó encantando con la actuación de Nati Mistral, quien dio vida a Dulcinea en nuestro país después de haberla interpretado en España y Argentina.
“Después de eso, ella fue mi primera develadora de placa en Los hijos de Kennedy (primera obra que Morris Gilbert produjo). Fue muy gentil y después de develar la placa me hizo un concierto sorpresa”. El productor recordó que cuando realizó El hombre de la mancha quiso que la actriz fuera la madrina de honor en su estreno, pero ella declinó por su delicado estado de salud.
“’Pero a cambio te voy a cantar la obra por teléfono’”, le dijo la actriz a Gilbert en ese momento. “Entonces la mismísima Nati Mistral me cantó todo El hombre de la mancha por teléfono. El caso es que el día que terminó la primera temporada, lo primero que me enteré ese domingo por la mañana, es que ella acababa de morir, el mismo día que cerramos la temporada en México”, recordó.
Durante hora y diez minutos, Morris Gilbert también contó otras experiencias que vivió en estos 45 años, como fue la censura de la obra Claudia que iba a presentar en Mazatlán y que tuvo que realizar en otro espacio cuando les prohibieron actuar en el teatro donde estaban programados porque “cómo se nos ocurría hablar de una prostituta en el escenario, eso era algo verdaderamente escandaloso. Obviamente el que leyó la obra no entendió absolutamente nada”, dijo.
.jpg "Inflación (1).jpg")
