Conmovida hasta las lágrimas, Joy Huerta, del grupo Jesse & Joy, lamenta la inseguridad que se vive en México, pero no dejará de alzar la voz para visibilizar la problemática que actualmente sufren las mujeres.
“Perdón que llore, la verdad me he alejado mucho de redes sociales porque la vida ya no me da para las malas noticias. No puedo con que son tantas las mujeres que nos hacen falta.
“Lo digo con miedo, sé que vivimos en un país donde cada vez más se empieza a atacar la libertad de opinión pública, pero lo digo con la misma certeza de que todos los mexicanos y las mexicanas queremos un mejor país y estamos en esta lucha”, afirmó Joy en conferencia de prensa.
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Al igual que otras mujeres, Joy vive el día a día con incertidumbre, dijo, como una mexicana que teme el salir a la calle, llena de angustia.
“Estoy segura de que cada quien tenemos un impacto en esta sociedad, las veces que salgo a marchar con mis hermanas lo hago desde un lugar genuino, creyendo que puede haber un mejor futuro.
“Creo que somos una generación muy privilegiada por el hecho de tener tanta información a nuestro alcance, pero al mismo tiempo somos una generación con tanta responsabilidad, con tanto peso encima de que sabemos que podemos ser parte de la solución o parte del problema”, aseguró.
Incluso reconoció que el componer música con mensajes positivos es un gran reto sobre todo por el entorno de violencia que atraviesa México.
“Con todo y eso, Jesse y Joy siempre hemos tratado de hacer nuestra música desde un lugar sano, en el que la persona que esté cantando la pueda cantar desde un lugar de poder, de decir ‘yo decido estar o no estar’”, comentó.
Parte de esa reflexión, así como discursos de empoderamiento son los que los hermanos incluirán en su sexta producción discográfica misma que estará disponible el viernes, día en que se presentarán en el Auditorio Nacional.
“Estamos viviendo en general una etapa de muchos cambios, muchas transiciones, de mucha introspección, ansiedad, de mucho pensar y creo que más que nunca el poder volver a salir de gira, con ese pensamiento de conciencia las cosas no volverán a ser como antes, van a ser mejores porque cada segundo que pasa lo valoramos.
“Tratamos de enfocarnos en el presente, hicimos este disco pensando en disfrutar el momento, en lo que estamos viviendo. Nos gusta hacer una historia, una pieza de arte que represente a Jesse y Joy dentro de 10 años”, compartió Jesse.
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Clichés es el nombre del material, así como el sencillo que recién estrenaron y que abordan varias costumbres que tienen inculcadas desde hace unos años.
De hecho, un cliché que recordó Joy en la plática es sobre la celebración del 10 de mayo, Día de las Madres.
“Siempre he tratado de alzar la voz para que se reconozcan todos los tipos de maternidades, no sólo el 10 de mayo, por supuesto que es un día que todo el país aprovechamos para no dejar de hablarle a nuestra mamá, ojalá sean todos los días.
“En esta ocasión como cualquier otro día de la semana lo que quiero es despertar y ver la carita de mis hijos y de mi esposa Diana (Atri)”, aseguró.
Retomar sus actividades de forma presencial, en tours internacionales, ha recordado el amor que el dúo le tiene a su carrera, pero también genera sentimientos encontrados, sobre todo en la artista de 35 años ya que es de las primeras veces que se separa de sus hijos Noah y Nour.
“Reitero toda mi admiración para las mamás y los papás solteros que tienen que salir no sólo con un trabajo sino más de uno para sostener a sus familias porque es devastador el alejarte de tu familia cuando es algo que quieres hacer y donde quieres estar.
“Pero me da mucho gusto tener la emoción de volver a casa, ver sus caritas, a veces me tengo que esperar hasta el otro día porque ya se durmieron porque era tarde. Pasó algo curioso en esta gira de Estados Unidos en las que estuvimos en más de 23 ciudades, estaba muy nerviosa, antes de irme estaba con mucha ansiedad por la separación y me sucedió algo fuerte que, por dos años de no estar en la presencia con nuestro público recordé cuánto amo lo que hacemos, el cariño de la gente, me sentí muy arropada por ellos.
Era un momento dulce y amargo al mismo tiempo”, dijo.
