Antes de cumplir 40 años, Adal Ramones llegó a experimentar la presión social de alcanzar la cúspide del éxito a esa edad, pues su meta era vivir de su trabajo en el entretenimiento para ese entonces.
Afortunadamente, este sueño lo cumplió a la mitad de sus treintas, gracias al estreno de Otro rollo, el late night show que lo dio a conocer en toda Latinoamérica, y lo catapultó como comediante.
“Eso de buscar triunfar antes de los 40, y que se logró un boom gigante, me dio la tranquilidad de decir ‘lo logré’”, comentó el también actor en entrevista con El Sol de México. “Ni cuenta me di de la crisis de los cuarenta, de que se me cayó el pelo, que me salieron arrugas, no noté nada, porque estaba sumergido en tener una familia y ver crecer el programa”.
El actor revivió esta etapa de su vida recientemente, al interpretar a Paolo en la película Cuarentones, que cuenta con la dirección del italiano Pietro Loprieno.
Su personaje es un chef mexico-italiano que está a punto de viajar a Cancún para participar en un concurso de pequeños restaurantes, y aunque todo marcha bien, sus planes se truncan cuando su socio y amigo, César (Erick Elías) descubre un terrible secreto que su esposa le guardó, arruinando por completo su estado de ánimo.
Al interpretar a un hombre de ascendencia italiana, tuvo la oportunidad de realizar algunos diálogos en otro idioma, y con ello recordó una divertida anécdota que le sucedió durante un viaje a Venecia con Yordi Rosado y el productor Lalo Suárez.
“Entramos a una tienda y Yordi no sabía cómo íbamos a pedir de comer. Entonces le dije, ‘espéta, espéta… Señore, y uni fromaggio y panini…’”, exclamó entre risas, mientras articulaba un italiano que él mismo inventó en aquel momento, para remediar la situación.
“En eso escuché que se murmuraban entre ellos que hablaba italiano, y Lalo exageró más porque pensó que hablaba cuatro o cinco idiomas. Cuando estábamos comiendo me preguntaron por qué no les había dicho que hablaba italiano, así los traje un día y medio hasta que le confesé la verdad”.
El también presentador subrayó que una de las cosas que más disfrutó de este proyecto fue dar vida a alguien con una visión tan positiva de la vida, pues independientemente de las crisis de la edad, siempre habrá tragos amargos y hay que saber enfrentarlos.
Al preguntarle cómo lidia con esos altibajos en su día a día, respondió que es “lo contrario a mi personaje, le he ido bajando, pero soy muy aprehensivo, y era más aún. Me tenía que tomar una pastilla de valemadrismo, porque soy de los que pasa algo y no paro hasta que se arregle. También soy intenso, esos detalles pueden ser atractivos para una pareja, pero no siempre”.
Cuarentones, se estrena este fin de semana en salas de cine, es apta para adolescentes y adultos.