Los años azules, ópera prima de la cineasta de Aguascalientes Sofía Gómez Córdova narra la vida de cinco jóvenes que en el intento de liberarse del yugo paterno deciden compartir una misma casa.
Un drama con toques de comedia se deriva de esta premisa en la que se demuestra que estos impetuosos millenialls están muy lejos de cortar el cordón umbilical familiar, sobre todo por la dependencia económica que viven.
Tras cinco años de espera desde su producción hoy se estrena esta cinta no sólo en pantallas de la Ciudad de México, también llega a Guadalajara -lugar de origen de la producción-, Puebla, Querétaro, Toluca, Mérida, Morelia, Oaxaca, León, Guelatao y Aguascalientes.
“El primer fin de semana es crucial que la gente asista para garantizar la permanencia de la película en la salas. Es una película que hicimos pensando mucho en el espectador y la respuesta ha sido favorable en los festivales donde se nos han dado premios, y creemos que eso puede llegar a un público más amplio", mencionó la directora nominada al Ariel.
En compañía de Gómez Córdova, está parte del elenco de la cinta, entre ellos Paloma Domínguez, Diana, Natalia Gómez y Juan Carlos Huguenin, quienes coincidieron que “la historia muestra un drama generacional. Son cinco personas con su propia crisis generacional, aunado a la temática de emancipación familiar, de búsqueda de la identidad, de su orientación vocacional como parte de su vida de post adolescencia".
INSPIRADA EN SU VIDA
Sofía Gómez además de dirigir coescribió el guión con Luis Briones hizo el guión y tuvo la oportunidad de filmar en la casona que en su momento habitó como estudiante foránea de Cine en Guadalajara.
“Los personajes femeninos dominan la película, aunque son cinco y cada uno con sus roles indistintos, mi perspectiva femenina es muy evidente, los tres papeles que dominan las situaciones son de las mujeres. Cada uno cumple un rol distinto que genera conflictos sobre todo a partir de un personaje que llega a la casa y rompe esa aparente armonía que Silvia y Angélica han creado a través del establecimiento de reglas específicas y al integrarse Diana no las respeta y da pie a convertirse en una familia disfuncional ante la diversidad de ideas, personalidad, cultura, rango social, económico".
Los actores destacaron que la directora les permitió tallar y pulir a cada uno sus personajes. “Nos dejó darles una personalidad para que la historia fuera lo más apegado a la realidad de lo que viven en la actualidad las personas que comparten casa, que al igual que los padres dejan una profunda huella tanto en la personalidad, porque se reafirma que tan relativos son los valores que te inculcaron tus padres y esto se pone en contraposición de los valores de otras personas”, concluyeron.