La era de los magos tradicionales está en extinción, pero su lugar es rápidamente ocupado por quienes se hacen llamar ilusionistas y ocho de los mejores en el mundo y que cuentan con su espectáculo en Broadway, llegan a México para presentar sus sorprendentes actos.
El teatro Telcel es el escenario donde Sabine Van Diemen, considerada la mejor hechicera; Aryel Altamar, quien manipula las mentes; Joaquin Kotkin encargado de crear lo surrealista, y Florian Sainvet es el manipulador, destacan por su participación, pero no dejan atrás las destrezas de Leonardo Bruno, quien es el alquimista; Aaron Crow el guerrero, Matt Johnson el escapista y Mark Kalin como anfitrión.
Todos ellos cuentan con sus números por separado, por lo que el público pone mucha atención para intentar descubrir los trucos de estos ilusionistas que ante los ojos del espectador realizan sus actos con verdadera sorpresa.
Las dos horas de show transcurren muy rápido, pues cada uno de los actos mantiene al público cautivo, hasta que llega el hipnotizador y cambia el rumbo de la noche, arrancando no sólo sorpresa, sino muchas risas por la forma en que manipula a los 30 participantes, llevándolos a hacer cosas que nadie haría, mucho menos en un escenario y frente a cientos de personas.
Sobre los atractivos que cada uno de los ilusionistas presenta al público deben de ser vistos por el público, pues narrarlos, sería echar a perder el truco de cada uno de los diestros hombres y mujeres que realizan en cada una de las funciones de este espectáculo.
Quedan pocas semanas, pues el espectáculo se presentará hasta el 30 de junio en México.
