Se acabaron los tiempos en los que tenías que sintonizar tu programa favorito en un horario, canal y lugar específico, ahora los contenidos están al alcance de la mano y la diversidad existente es cada día mayor y global.
En el 2007, Netflix comenzó una nueva forma de entender y distribuir los contenidos audiovisuales al presentar una plataforma de Video On demand, exclusivamente por computadora. Ese fue el comienzo de lo que hoy se considera la guerra de plataformas y que ha puesto en debate el futuro de la televisión.
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Para Javier Gómez Santander, guionista de La Casa de Papel, “estamos ante un gran momento, nunca había habido un expositor de ficción tan grande como Netflix, y nos da a nosotros como creadores la posibilidad de que nos vea mucha más gente de todo el mundo, en un periodo de tiempo corto”.
Sin embargo, no todo es Netflix, en los últimos años ha aumentado el número de plataformas disponibles, así como los contenidos originales que generan.
HBO GO, Hulu, YouTube Premium, Amazon Prime Video, Apple TV+ y Disney+, son algunas de las plataformas que prometen un futuro diferente al mundo del entretenimiento, el poder cambió de lugar y ahora son los espectadores quienes deciden.
Miguel Ángel Fox, productor de programas como La Voz Kids o ¿Quién es la máscara?, considera que la migración de los televidentes a las plataformas streaming sólo ha sido tan abrupta en el país, “en Estados Unidos no está pasando, la televisión se complementa de las redes y de YouTube, aquí en México los cambios han sido muchos más agresivos”.
Esto no significa que se acerque fin de la televisión tradicional, se tratará de una simple adaptación al cambio.
En México, según datos de la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares, el 65.8% de la población de seis años o más es usuaria de Internet, herramienta indispensable para tener acceso a alguna aplicación que ofrezca la difusión de contenidos vía streaming.
Según un informe del Instituto Federal de Telecomunicaciones, un 98% de los hogares en México cuenta con al menos un televisor, el 51% del total de hogares con pantalla chica cuenta únicamente con señal de TV abierta, mientras que un 47% de los entrevistados declararon consumir contenidos audiovisuales por internet.
“Sí hay un público que quiere ver cosas de calidad, aún hay gente interesada en sentarse a ver la televisión si se le ofrece algo que amerite que tengas que dejar todo lo demás. Creo que los deportes y formatos de este tipo seguirán estando vigentes en televisión, donde está más fuerte la competencia es en la ficción, pero mientras tú ofrezcas algo de calidad la gente va a ir a buscarlo a donde esté, sea en las plataformas o en la televisión”, afirma Fox, quien es parte de Televisa, una de las empresas más importantes de comunicación en México.
“Lo que estamos viendo y que sucede en todo el mundo es que a medida en que alguien deje de pagar un servicio de cable, van a ir agregando otros más, por ejemplo en algunos países la contratación ya se hace por paquete y eso es más o menos lo que será el futuro de todos los países”, explica Superna Kalle, vicepresidenta ejecutiva de Redes Digitales de Starzplay.
Así, las empresas de televisión por cable han encontrado nuevas formas de mantener a las personas ofreciendo sus servicios y adicionalmente una suscripción a las plataformas, como el caso de Izzi con Netflix, o Amazon Prime Video con Starzplay y Paramount.
Apertura de contenidos
El avance que proponen las plataformas de contenido, no se limita a las cuestiones tecnológicas y al poder que le otorgan al espectador, sino que ha generado que los contenidos traten temas que no podían ser mostrados en la televisión convencional.
“La ficción se queda antigua muy pronto, las cámaras están cambiando, las ópticas están cambiando, antes el personaje principal tenía que ser blanco, no podía cometer errores, no podía hablar mal y eso se ha invertido; ahora gusta más la ambigüedad moral, personajes como Berlín un misógino, psicópata, egocéntrico, que aunque es moralmente cuestionable, le gusta a la gente”, explica Alex Pina, productor y guionista de La Casa de Papel.
Desde su perspectiva, las buenas series son detectadas de inmediato por “el espectador, porque son las sensaciones si estás entretenido, si te ríes, si te emocionas, estás ante una buena serie”, explica Javier Gómez Santander, “todo público hoy en día sabe lo que le gusta y lo que no, es un experto, ha visto muchas horas de ficción, si las dedicara a la física cuántica todo el mundo seriamos científicos”, añade Pina.
Para Warren Leight, showrunner de La Ley y el Orden, que ha sido transmitido en horario estelar por 21 años, el reto ha consistido en poder generar productos que funcionen para ambos formatos, tanto para quienes les gusta ver la serie de forma convencional como para quienes la ven por plataformas.
“Definitivamente ahora pasamos más tiempo en el salón de escritores pensando en cada personaje, un cambio que hicimos fue hacer que los argumentos atravesaran de un episodio a otro para que hubiera más continuidad, porque nuestros personajes tienen una línea que se desarrolla por toda la temporada”, explica Leight.
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