En su intento por ganar la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, los siete candidatos que compitieron en la pasada contienda hicieron un gasto total de 113 millones 607 mil 647 pesos de recursos públicos.
De acuerdo con el más reciente reporte de fiscalización del Instituto Nacional Electoral (INE), ninguno de los contendientes rebasó el tope de gastos de campaña, establecido en 30 millones 259 mil 504.80 pesos.
En la elección del pasado 1 de julio votaron cinco millones 372 mil 46 personas, según cifras del Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM), por lo que al dividirse entre el monto gastado en campaña, resulta que el voto por capitalino costó 21.14 pesos.
De las cifras que reporta el INE se desprende que tanto la ganadora de la elección, Claudia Sheinbaum (Morena, PT, PES), como Alejandra Barrales (PRD, PAN, MC) fueron las que más gastaron.
La morenista erogó 26 millones 718 mil 662.40 pesos, mientras que la perredista hizo lo propio con 26 millones 836 mil 219.25 pesos; es decir, entre las dos gastaron 53 millones 554 mil 881.6 pesos, que equivalen a 47% del gasto total.
Mariana Boy, del Partido Verde, fue la tercera con más gasto, con 27 millones 893 mil 411.30 pesos; atrás quedó Mikel Arriola, del PRI, con 21 millones 170 mil 504.30 pesos.
La candidata de Nueva Alianza, Purificación Carpinteyro, gastó cinco millones 944 mil 178.62 pesos; el del Partido Humanista, Marco Rascón, cuatro millones 859 mil 319.42 pesos y finalmente la aspirante sin partido, Lorena Osornio, reportó 185 mil 352 pesos.
Por casos específicos, el voto de la candidata Purificación Carpinteyro fue el más caro, pues apenas obtuvo 36 mil 105 votos, lo que da un costo por sufragio de 164.63 pesos.
El más barato fue el de Lorena Osornio: cada uno de sus 64 mil 591 sufragios tuvo un costo de 2.8 pesos.
EMPRESAS GANONAS
Las pasadas campañas no dejaron únicamente una ganadora, pues las empresas proveedoras de los candidatos también triunfaron al llevarse varios millones de pesos a la bolsa durante la contienda.
Las empresas ISA Corporativo y JCDecaux, dos de las más grandes en cuanto a publicidad, fueron de las más ganonas.
La primera controla los más de 70 mil espacios de publicidad del Sistema de Transporte Colectivo (STC) desde el gobierno de Andrés Manuel López Obrador; esta empresa fue proveedora tanto de Sheinbaum como de Barrales.
La morenista pagó una cifra de tres millones 787 mil 643.60 pesos para la renta de espacios publicitarios en la red del Metro; la perredista hizo lo propio con un pago de un millón 921 mil 875 pesos. En total fueron cinco millones 709 mil 518.60 pesos.
Por su parte Mikel Arriola, candidato externo del PRI, solamente pagó 100 mil pesos a ISA Corporativo y optó por la empresa publicitaria JCDecaux, con origen en Francia. El pago que realizó el aspirante del tricolor fue de seis millones 586 mil 670.42 pesos. El 27 de abril de 2017 esta empresa obtuvo de la Oficialía Mayor el permiso para explotar 898 espacios publicitarios en la Línea 7 del Metrobús, que va sobre Paseo de la Reforma, a cambio de una contraprestación anual de 11.5 millones de pesos.
Además JCDecaux es propietaria, desde abril de 2016, de la empresa de publicidad exterior Vendor, a través de la cual posee 241 de los mil 273 anuncios espectaculares reconocidos en el padrón de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda.
Otra empresa beneficiada en estas campañas fue La Covacha Gabinete de Comunicación S.A. de C.V., contratada por Barrales por 515 mil 620 pesos.
Esta productora fue la encargada de realizar el video viral de campaña del Movimiento Ciudadano, protagonizado por el niño huichol Yuawi López.
Una de las pocas empresas que fueron contratadas por tres candidatos distintos fue Lecteus S.A. de C.V., dedicada a la impresión en gran formato; de acuerdo con su perfil de Linkedin, es Fernando Escoto el director general de este grupo.
Lecteus fue contratada por Barrales, que pagó un millón 709 mil 980 pesos; por Arriola, que dio 432 mil 712.36 pesos y por Mariana Boy, que asignó 865 mil 124.55 pesos.
