Son las 9 de la mañana y las rescatistas de Abeja Negra se encuentran listas para recuperar una colmena que fue reportada en la calle de Isabel la Católica, en la colonia Narvarte Poniente, alcaldía Benito Juárez. Su labor es evitar que las maten o que mueran en su pequeño ciclo de vida de 45 días.
Actualmente en la Ciudad de México se calcula que hay cerca de tres mil colmenas callejeras, en las cuales habitan cerca de 180 millones de estos insectos, de acuerdo con Adriana Veliz, directora de Operaciones en Campo de Abeja Negra.
La colmena a rescatar se encontraba en un poste verde de luz, en la base había una parte rota y oxidada, en su interior ya habían construido su casa, es decir, trabajaron alrededor entre 18 a 24 meses para formar varios panales que contenían no sólo miel, sino que reguardaban celosamente a sus crías.
En esta tarea de rescate lo primero que se hizo fue involucrar a las autoridades de la alcaldía Benito Juárez y a la policía para condonar la zona, mover a un vendedor de jugos hacia unos metros más adelante y empezar las maniobras.
Este diario acompañó a la joven rescatista en esta labor. Para ello el equipo de El Sol de México debió vestir trajes especiales y una especie de velo en la cabeza para evitar piquetes de abejas enojadas.
El Ahumador, que es una especie de cafetera con el que se ayudan a lanzar humo que contiene fosfato de nitrato se usa en cantidades pequeñas para adormecerlas. Este humo inhibe una feromona de la abeja reina y evita que se comuniquen entre ellas para prevenir un ataque comunitario.
De aquí viene el trabajo rudo, que es el de quitar la tapa del poste, mazos, cinceles, barretas, seguetas salieron a relucir, y después de más de casi dos horas de intentarlo, se logró sacar la colmena y sus panales, dos de los cuales contenían las crías.
Adriana Veliz comentó que en estos días previos a la primavera logran recuperar de dos a tres colmenas diarias, las cuales son llevadas a apiarios en Xochimilco y Malinalco. Explicó que ellos cobran a particulares de 900 a mil 800 por llevarse las abejas y en el caso de la alcaldía Benito Juárez reciben sólo viáticos.
Se quedan con una parte de las colmenas y la otra la entregan a apiarios que sólo les entregan material, como son las cajas donde colocan la colmena, es decir, los panales, las crías y las abejas.
Dependiendo del tamaño de las colmenas será el número de abejas que habiten en ellas. Por ejemplo, una pequeña tendrá alrededor de 40 mil, una mediana 60 mil y una grande 80 mil, aunque se llega a dar el caso de que coexistan en un mismo lugar cerca de 100 mil.
Los lugares donde se instalan suelen ser árboles, postes de luz, alcantarillas, paredes, autos abandonados, tinacos de asbesto sin usar, específicamente lugares secos y donde puedan alimentarse.
Manifestó que para que las abejas recuperadas produzcan miel debe pasar un año, lo que lo hace un negocio poco rentable. Ante esta situación indicó que muchos apicultores están comercializando productos elaborados con miel como son los jabones, gomitas de azúcar para la tos, lápiz labial y desodorantes. Destacó que la miel es un producto estéril.
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