Juan Carlos Uriarte Amann es dueño de Grupo ADO y es común verlo en los listados de los 100 empresarios más poderosos del país. En la Ciudad de México expandió su negocio al transporte turístico con Turibús y al masivo con la Línea 3 del Metrobús. En 2017 sumó un negocio más a su lista: recibió una concesión del gobierno capitalino para el uso, aprovechamiento y explotación del Centro de Transferencia Modal (Cetram) de San Lázaro.
Para recibir la concesión, el 8 de diciembre de 2017 el empresario Uriarte Amann y su socio Francisco Xavier González Ezeta fundaron la empresa Puerta San Lázaro S.A. de C.V., según consta en el acta constitutiva de la que El Sol de México tiene copia.
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Como en el resto de los Cetram, el objetivo fue entregar en concesión el paradero, en este caso 27 mil 526 metros cuadrados de superficie pública, para que la empresa Puerta San Lázaro reordenara y modernizara la operación del mismo, a cambio de permitir el desarrollo de un centro comercial.
El Gobierno de la Ciudad de México preparará durante 2021 el proyecto ejecutivo para la Línea 0 del Metrobús, y la obra podría estar iniciando este mismo año, o a inicios del siguiente, dependiendo de la disponibilidad presupuestal. No deja de ser curioso que la primera línea que construye esta administración, en vez de seguir el número consecutivo que correspondía, es decir la 8, opte por un número inusual que representa la forma de la propia línea: un circuito.
Los detalles de la línea 0 serán presentados próximamente por el Gobierno de la Ciudad de México, pero en principio utilizará los carriles laterales tanto de los tramos continuos del Circuito Interior, como los correspondientes al par vial que conforman las avenidas Patriotismo y Revolución, lo cual de manera práctica e irónica, terminarán por conformar una letra P y no un 0, ya que los servicios de Revolución llegan hasta San Ángel.
Tengo recuerdos de los años ochenta con el transporte público del Circuito Interior. Decenas de veces esperé por horas los autobuses de la Ruta 100. La incorporación de los camiones de la Red de Transporte de Pasajeros del Circuito Bicentenario, al final de la administración de Marcelo Ebrard, fue un salto adelante, aunque varias de sus paradas están muy separadas una de la otra. En algunas ciudades del mundo, la existencia de líneas La Línea 0 debe circulares para sus trenes ayuservir para conectar da a resolver la conectividad entre sí los servicios de los servicios, y eso es lo que de la zona central de potencia el probable éxito de la octava línea que opere el Mela ciudad y fortale- trobús. cerlos en los próxi- Asimismo, la Línea 0 remos años fuerza un planteamiento conceptual que hice hace algunos años. Me parece que el Gobierno de la Ciudad debe resolver los problemas del transporte del centro a la periferia.
Invertir el orden parecería una perspectiva de justicia social, pero conlleva mayores dificultades de instrumentación porque al final los viajes buscan llegar a las zonas centrales. La línea 0 debe servir para conectar entre sí los servicios de la zona central y fortalecerlos en los próximos años, lo que de hecho también se proponía en 1978 con las obras de los Ejes Viales.
En el tramo de Revolución, uno de los elementos que me parecen clave, es que el diseño del servicio debe ser tal que reduzca la presencia de servicios desordenados desde las barrancas del poniente.
Un buen diseño debería llevar el Metrobús hacia esos corredores, por ejemplo, que el servicio se ramifique desde el Metrobús, en vez de seguir permitiendo paraderos en San Antonio, Mixcoac, Barranca del Muerto, San Ángel y Estadio Olímpico.
Por último, me parece clave que esta línea de Metrobús haga una revisión de las reglas de uso del Circuito Interior. Si el autobús circulara por la lateral, así sea con autobuses eléctricos, va a compartir el espacio con la carga, lo cual eleva las afectaciones a los pasajeros por contaminación y los riesgos de incidentes viales.
La decisión correcta es que la carga pueda utilizar los carriles centrales que, para beneficio del auto, siempre han estado privados de esa convivencia.
Según la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, será a finales de 2022, cuando estrenemos una nueva línea de Metrobús, la primera de su administración.
Este diario confirmó con el gobierno de la Ciudad de México que el proyecto del Cetram San Lázaro también está en revisión, pero hay más avances debido a que era el menos invasivo con áreas comerciales.
En la propuesta básica se planteó la construcción de 33 mil 315 metros cuadrados de obra rentable destinada para tiendas ancla, pequeñas y medianas, en este paradero en el que confluyen la Línea 1 y B del Metro, la 4 y 5 del Metrobús y la Terminal de Autobuses de Pasajeros de Oriente (TAPO).
San Lázaro, argumentó la concesionaria con un estudio, “es un proyecto que cuenta con soluciones integrales a la problemática del ordenamiento del transporte concesionado y que mediante el desarrollo de infraestructura urbana busca obtener un mayor control y automatización de la operación, que permita hacer más eficientes las conexiones entre las distintas alternativas de transporte y que tendrán un impacto positivo para el desarrollo urbano, social, económico y ambiental, añadiendo plusvalía a la zona y vecindarios colindantes”.
La flota de autobuses que opera Uriarte Amann rueda también del otro lado del Atlántico, en España, donde en 2013 compró Avanza, el primer operador de autobuses de aquel país.
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