En la ciudad de México los servicios de cremación del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) presenta una alta demanda y “saturación desde hace tres semanas” por la cantidad de personas que fallecieron de Covid-19, por lo que en este momento quienes llegan a ese lugar a solicitar el servicio deben esperar hasta tres días para que se realice el proceso de incineración en el Panteón Parque Memorial.
Según trabajadores del lugar sólo operan dos hornos y el servicio se retrasa hasta tres días, en este momento sólo hay espacio hasta el próximo miércoles por la noche.
Desde hace tres semanas que se intensificó la epidemia en la Ciudad de México se ha registrado un incremento en el número de familiares que acuden a solicitar el servicio de cremación de las personas que fallecieron a consecuencia del Covid-19.
En promedio por día se realizan 8 procesos crematorios, de 6 a 7 de ellos corresponden a pacientes por Covid-19, indicaron a El Sol de México quienes ahí laboran.
El servicio se ofrece desde las 6 de la mañana y las instalaciones se cierran hasta las 1:30 horas, el último de los procesos de incineración arranca a las 22:30 horas cuando ingresan al horno las últimas dos personas.
Aunque en un principio los fallecidos que calificaron como sospechosos del virus podían ser inhumadas, la Secretaría de Salud y el registro civil determinaron que ya no podían seguir ese procedimiento y ahora quienes fueron confirmados y sospechosos por Covid-19 deben entrar a la cremación.
Indicaron que hace tres semanas incrementó el número de personas que llegan hasta ese lugar, ubicado en Naucalpan, en el estado de México, con el propósito de buscar los servicios cuyo costo es de mil 993 pesos para los derechohabientes y de 2 mil 990 pesos para quienes no cuentan con afiliación al ISSSTE.
Debido a la carga de trabajo, los servicios funerarios del instituto no ofrecen el traslado de los cadáveres hasta en panteón, por lo que se les solicita a los familiares que sean ellos los que se encarguen de contratar un servicio funerario para que la carroza traslade el cuerpo del fallecido desde el hospital o domicilio hasta la sede del panteón.
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