Lo que tenía que facilitar la vida de Tizoc y Nohení, de 80 y 70 años de edad, maestros de danza, fue lo que acabó con su vida, luego de que el elevador que utilizaban para moverse se desplomara y cayera desde el segundo piso.
De acuerdo con los primeros reportes, los cuerpos de emergencia fueron requeridos en el número 241 de la calle Héroes, en la Colonia Guerrero, debido a que el elevador del inmueble se había desplomado con tres personas en su interior.
En poco tiempo, personal de Protección Civil de la demarcación, bomberos y paramédicos de la Cruz Roja Mexicana se presentaron en el lugar para brindar ayuda a los maestros de danza y a su acompañante.
De acuerdo con versiones de vecinos y maestros de la academia de baile Mizoc, ubicada justo al lado del inmueble del percance, el elevador había sido colocado apenas hace poco más de un año, debido a que los adultos mayores ya no podían caminar muy bien.
Socorristas valoraron a las dos mujeres y el hombre que habían resultado lesionados, sin embargo, únicamente pudieron sacar a Isabel “N”, de 47 años de edad, quien presentaba fractura en la pierna y el brazo izquierdo, por lo que fue trasladada al hospital Rubén Leñero.
Policías preventivos de inmediato aseguraron el lugar y notificaron al agente del ministerio público para que se presentara a iniciar con las indagatorias correspondientes.
La noticia llegó muy pronto a los cuatro hijos de la pareja quienes incrédulos permanecieron al exterior de la casa en tanto bomberos y peritos realizaban sus labores al interior del inmueble.
Apoyados por los vulcanos, los peritos sacaron envueltos con mantas blancas los cadáveres de Tizoc y Nohemi para trasladarlos al anfiteatro de la demarcación, quienes fueron despedidos con aplausos por sus vecinos y amigos que se reunieron afuera de la academia de danza.
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