El edificio que albergó los Cinemas Anzures, en la calle Bahía de Todos Los Santos 190, está abandonado desde hace 20 años por lo que una inmobiliaria solicitó al Congreso local permisos para convertirlo en un espacio con terraza, restaurantes, locales para venta de bebidas en general y una sala multifuncional.
El inmueble nació en 1951 como Frontón Metropolitano y foro de actividades deportivas, incluso encuentros de lucha libre tuvieron lugar ahí, luego sus dueños lo habilitaron como los Cinemas Anzures y al final lo abandonaron.
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La Inmobiliaria Coar presentó una iniciativa ciudadana ante el Congreso de la Ciudad de México para modificar el Programa Delegacional de Desarrollo Urbano de Miguel Hidalgo, a fin de rescatar ese edificio ubicado en la colonia Verónica Anzures. La intención es cambiar el uso pues en 2008 recibió permiso para suelo habitacional y comercial y la inmobiliaria solicita ahora la transformación a solo comercial.
La inmobiliaria consideró que es un inmueble de carácter histórico, que merece rescatarse con un proceso de regeneración urbana, además la construcción de una sala de usos múltiples para conciertos y obras de teatro servirá para ampliar la oferta cultural. Aclaró que no buscan la demolición del inmueble actual para edificar uno nuevo y que de prosperar la propuesta abre la posibilidad a la generación de 250 empleos.
Actualmente el estado del inmueble, de dos pisos, es deplorable, las cortinas y paredes tienen grafitis y las letras de su marquesina hace tiempo que desaparecieron. Solo en uno de sus costados aparece el nombre del local, Ultra Cinemas Anzures.
La antesala no tiene ningún mobiliario, sobre su piso se amontonan pilas de cascajo y el techo empezó a caer.
El cine contaba con dos salas, cuyas pantallas para la proyección de películas desaparecieron y ahora es posible ver algunas butacas de color naranja y la pared de fondo con el color verde clásico de los frontones, y las marcas para señalar los metros.
El inmueble, cuya marquesina luce deteriorada, tiene de un lado un estacionamiento y del otro una distribuidora de Volkswagen. Frente a lo que queda de los Ultra Cinemas Anzures está la taquería Los Ovnis, fundada en 1965, cuando todavía estaba en funcionamiento el Frontón Metropolitano, pero sus empleados solamente recuerdan cuando servía como cine y que algunos de los espectadores salían de las funciones para ir a comer ahí.
“Si lo reactivan sería bueno, tendríamos más clientela, pero nosotros ya tenemos nuestro nombre y clientela”, expresaron.
La propuesta que ahora analizarán los diputados capitalinos es transformar ese lugar, en plena ruina, en un espacio para servicios culturales con terraza, restaurantes, locales de venta de bebidas en general y una sala multifuncional, cuya altura máxima sea de cuatro niveles.
Inmobiliaria Coar entregó la iniciativa a Fausto Manuel Zamorano Esparza, presidente de la Mesa Directiva del Congreso de la Ciudad de México, y en ella consideran que dicha obra no afectaría la dinámica de vivienda en la colonia Verónica Anzures, que ya cuenta con una oferta de hogares.
El proyecto prevé albergar en el inmueble a cerca de cuatro mil 22 personas entre asistentes, comensales y trabajadores y eso lo convertirá en un punto de concentración masiva en una zona consolidada y abastecida en su totalidad de servicios básicos.
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“Dicho proyecto podrá hacer de la colonia Verónica Anzures una zona dinámica, revitalizada y atractiva que eventualmente promoverá el turismo social, asimismo la recuperación del inmueble incentivará la disminución de la incidencia delictiva y fomentará el desarrollo económico. En este sentido, el proyecto de manera integral impulsará el desarrollo de la alcaldía Miguel Hidalgo, además de generar una mayor habitabilidad urbana”, argumentó Gerardo Polo Cedillo, apoderado de la Inmobiliaria Coar.
