El exministro de Economía, y de Relaciones Exteriores deMéxico, Luis Ernesto Derbez Bautista, consideró como una“tontera” que México renegocie el Tratado de Libre Comercio deAmérica del Norte (TLCAN), pues una posible cancelación del mismobeneficiará la nación latinoamericana.
En entrevista con Efe, el rector desde 2008 de la Universidad delas Américas Puebla (UDLAP), dijo que el Gobierno mexicano debeluchar para que el TLCAN quede “como está y sin modificarse”,y proponer a Donald Trump, en todo caso, hablar “de algonuevo”.
El republicano es contrario al TLCAN porque considera queperjudica la industria, el comercio y el empleo de Estados Unidos(EU), en beneficio de México.
Es por ello que en esta coyuntura, Derbez estimó que elrepublicano rechazará cualquier opción que no implique remodelarel Tratado. El proceso de cancelación de este acuerdo comercial--vigente entre Canadá, México y EU desde 1994--, se alargaríahasta el próximo año, y de suspenderse, se retomarían las reglasde la Organización Mundial del Comercio (OMC).
“Él no podría incrementar (los aranceles)”, por lo queMéxico “saldría ganando”, señaló Derbez en referencia a quelos aranceles serían menores para las exportaciones mexicanas aEU, que viceversa.
Tras ofrecer la conferencia “México en la era Trump:Geopolítica y finanzas” en la Cámara Española de Comercio, eldos veces ministro durante el mandato de Vicente Fox (2000-2006),del conservador Partido Acción Nacional (PAN), opinó también queel muro que el republicano ordenó construir a lo largo de lafrontera común no evitará “el paso de la gente”.
Lamentó, no obstante, que México haya aceptado esta“discusión emocional” sobre quién pagará el muro, y alertóal vecino del norte del peligro para el consumo interno de medidascomo un incremento de impuestos a productos mexicanos.
“Es una discusión tonta, pero caímos en ella, y la estamosdisfrazando de fortaleza nacional. Dando pie a conceptos populistasy nacionalistas que son patéticos en el siglo XXI, pero yaentramos en la discusión”, aseveró.
Con claridad, Derbéz dibujó un panorama complicado, perotambién lleno de oportunidades para México en esta nueva era.
Señaló que si bien la llegada de inversión “serálimitada”, la industria tampoco se marchará de México, por loque la cancelación de la construcción de una planta de Ford esteenero será casi la excepción.
En este contexto, dijo, México tendrá que “buscar estímulosinternos en infraestructura y cuestión fiscal” para poder“contrarrestar” las políticas del magnate neoyorquino.
“Esto nos obliga a pensar en el desarrollo ya no comomanufactura, sino como centro tecnológico”, apuntó.
El cambio de modelo llevaría unos diez años, pero daría alasa México para ser una potencia regional más allá de sumanufactura.
A diferencia de muchas voces de los sectores político yeconómico, el ex canciller (2003-2006) consideró quediversificarse no es la solución, pues el mundo, y especialmentela región norteamericana funciona como una cadena deproducción.
Es el caso automotor, que fabrica partes en EU y China, lasensambla en México y las vende a su vecino del norte.
El peor momento en la relación entre México y EU en décadasllega, además, en circunstancias difíciles para la democracia conla llegada del populismo y autoritarismo que ejemplifica DonaldTrump.
En opinión de Derbéz, este fenómeno probablemente seráreplicado en las elecciones presidenciales de México en 2018, concandidatos como el izquierdista Andrés Manuel López Obrador(AMLO).
“Estamos volviendo a una época en que es el líder que debeser importante, y no la estructura institucional del país”,lamentó.
Derbéz pidió revisitar el pasado para no cometer los mismoserrores.
Puso como ejemplo la orden de Trump de cancelar las visas deentrada a ciudadanos de siete países de mayoría musulmana, que unjuez federal bloqueó y que el presidente ha criticadoduramente.
“No puedo creerme que un juez ponga el país en semejantepeligro. Si algo pasa la culpa es de él y el sistema judicial”,dijo el presidente de EU en Twitter.
Derbez recordó hoy que Hitler también atacó a lasinstituciones: “Y después vinieron los escándalos, la quema delReichstag, etcétera. Esto ya lo hemos visto”. EFE
