- Manzanillo y Tecomán acumulan el mayor número decrímenes
Victor Manuel Chávez y Martha de la Torres
María fue testigo de un ataque a balazos que terminó con sutranquilidad y la de sus vecinos. El 5 de marzo caminaba en eltianguis vespertino que se instala a un costado de las vías en lacolonia Nuevo Milenio de Colima, cuando dos sujetos dispararoncontra una mujer que salía de un consultorio dental.
El ataque causó pánico entre la multitud que acudía altianguis al anochecer. Algunos corrieron hacia el lugar de laagresión para saber qué había ocurrido mientras que otros, comoMaría y su amiga, prefirieron resguardarse en sus casas dejandolas calles vacías.
Colima atraviesa la peor crisis de violencia de su historia. Deregistrar 99 homicidios dolosos en 2014, pasó a reportar 167 en2015 y 600 en 2016, lo que significa que en solo tres años losasesinatos se multiplicaron por seis. Se trata de una cifra sinprecedentes para un Estado que entre 1997 y 2013 tuvo un promediode apenas 81 asesinatos al año. Y 2017 no pinta mejor.
Enero terminó con 69 homicidios dolosos, la segunda ciframensual más alta registrada desde 1997 en las estadísticas delSistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP), solo por debajo deabril del año anterior, cuando se cometieron 74 asesinatos.
El puerto de Manzanillo, que junto con Tecomán registra elmayor número de crímenes en la entidad, fue noticia ese mes pordos multihomicidios: siete cuerpos mutilados en un taxi y cincocadáveres que fueron dejados en un predio a las afueras delmunicipio.
En diversos reportes, autoridades federales y estatalesidentifican como el detonante de la violencia la guerra entre elCártel del Pacífico y el Cártel Jalisco Nueva Generación por elcontrol de los puertos y las vías de acceso al occidente delpaís.
Se trata de un conflicto que no solo afecta a Colima, sinotambién a los Estados de Jalisco y Nayarit. Y es que lo que estáen juego no es cosa menor: “la ruta del Pacífico” de la drogahacia Estados Unidos.
Del más tranquilo al más violento
El año pasado Colima se situó como la entidad más violentadel país al registrar una tasa de 82 homicidios dolosos por cada100 mil habitantes, muy por encima de la media nacional (que fue de17).
Aunque las autoridades indican que la seguridad mejoró tras lallegada del Ejercito y la Policía Federal, Manzanillo volvió aser nota el 13 de marzo cuando dejaron una cabeza humana envueltaen una bolsa negra en el interior de la presidencia municipal.
“Aquí mataron a un señor en el parque y más arribita, a unaseñora. Aquí vienen y me dicen que acaban de balacear a un señoren una moto, que es policía. Eso no se veía antes, ahorita estáde la jodida”, manifestó una comerciante.