El consejero Alejandro Rojas Díaz Duran solicitó a la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia de Morena, que abra un juicio para sancionar con la inhabilitación del cargo como Secretaria General en funciones de Presidenta a Yeidckol Polevnsky, por la renta de un avión privado en plena campaña electoral.
En una carta, Diaz Durán demandó que la actual dirigente "muestre la factura correspondiente a su nombre, como fiscalmente corresponde, ya que de no comprobarlo, estará cometiendo flagrantes violaciones a los principios fundacionales de Morena y a sus Estatutos: no mentir, no robar y no traicionar al pueblo”.
“Yeidckol Polevnsky debe denunciar ante el Ministerio Público las amenazas de muerte que dice haber recibido. No denunciarlo es fomentar la cultura de la no denuncia y está enviando un claro mensaje de que desconfía de la Fiscalía General de la República (FGR) y de las instituciones del Estado mexicano”, sostiene en la misiva.
Además, explica que es un deber moral de aportar los elementos para que la FGR inicie la investigación correspondiente y “responda lo siguiente: ¿De qué número le llamaron?; ¿Qué días la amenazaron?¿Tiene registro de las llamadas? ¿Por qué no reportó al INE la renta del avión privado en plena campaña?”.
¿Ignora que a Morena nos pueden multar por ello?, cuestionó el morenista.
Por lo anterior, dijo que si no comprueba éstos hechos ante el Ministerio Público, que deben ser considerados como delito, entonces, mintió y habrá falseado ante la autoridad y es un delito.
Alejandro Rojas acotó que el tema de fondo es que Morena está obligada a construir las bases de un nuevo régimen político y, sobre todo, fundar una nueva ética política y una nueva moral pública, a fin de fortalecer a las instituciones y la representatividad ciudadana.
“La edificación de un nuevo Estado social y de Derecho no puede estar basada en la simulación y en las prácticas que carcomieron al régimen político y derivaron en la corrupción rampante, la impunidad criminal y la ilegalidad de la que gozan los cárteles criminales y político-económicos, insertos en un modelo de desarrollo económico depredador que dejó como saldo a millones de mexicanos en la miseria y pobreza extrema”, insistió.
En la carta entregada, también subraya que ese régimen político de privilegios, prebendas y moches, “está podrido en el cáncer que representó la simbiosis de la ambición política que entregó el interés público a un puñado de intereses privados que se apoderaron del poder público”.
“Eso fue rechazado por una nueva mayoría política que confía en que Morena sea un partido del siglo XXI y no una copia mal hecha de los partidos del siglo pasado”, aseguró.
Por último, envió un postdata: “aún sigo manteniendo mis derechos políticos a salvo, en tanto no resuelva el Tribunal Federal Electoral mi inconformidad de la ilegal y antidemocrática resolución en mi contra”.