Durante las pasadas elecciones presidenciales de 2018, por cada 100 pesos registrados como erogaciones ante el Instituto Nacional Electoral (INE), los partidos políticos gastaron 6.7 pesos sin reportarlo, como identificó la Auditoria Superior de la Federación (ASF) en su tercera entrega de su informe sobre fiscalización de la cuenta pública 2018.
Ello, al detectar que los aspirantes a un cargo público, por un partido o de manera independiente, obtuvieron ingresos no registrados para este proceso electoral por 185 mil 200 millones de pesos, mientras que el monto de los egresos no reportados fue equivalente a 150 mil 070 millones de pesos.
“Aunado a lo anterior, se identificó que la proporción de errores u omisiones en materia de fiscalización de errores u omisiones no subsanados en la etapa de campaña crecieron en 84.5 por ciento, de 24.6 por ciento en 2015 a 45.4 por ciento en 2018”, estima la ASF.
Por su parte, comprobó que una de las cinco agrupaciones contendientes en dicho proceso se endeudó en créditos bancarios por un monto de 125.5 por ciento mayor a la deuda que podía adquirir, aun cuando el INE conoció de dicha situación posterior a la formalización de dicho instrumento.
En este sentido, detalló que los partidos políticos tuvieron acceso a 6 mil 709 millones de pesos como parte del financiamiento público y a 899 mil millones de pesos en recursos privados de los que pueden recibir; así como que dos de estas agrupaciones recibieron un dictamen de endeudamiento por parte de la autoridad electoral.
Con información de Gabriel Xantomila | El Sol de México