Luego de dos días de retraso, el gobierno y la oposición de Venezuela reanudaron este domingo, en la Ciudad de México, la tercera etapa del diálogo, donde se esperan acuerdos fructíferos, informó el representante plenipotenciario del Gobierno de Venezuela ante la mesa de diálogo, Jorge Rodríguez.
"Hoy reanudamos las actividades con la plataforma unitaria y esperamos que sea tan fructíferas y constructivas las reuniones, como las que hemos tenido en el pasado", informó el también diputado, presidente de la Asamblea Nacional.
El retraso derivó de las declaraciones de Erna Solberg, primera ministra de Noruega –país mediador–, en la Asamblea General de la ONU, quien expresó su preocupación por los derechos humanos en el país sudamericano.
"Hemos visto graves violaciones de derechos humanos en muchas partes del mundo. En Venezuela. Las atrocidades y el conflicto de Tigray. La situación en Myanmar. Y eso no son más que unos ejemplos", expresó la primera ministra que perdió las elecciones.
Venezuela pidió a Noruega explicaciones el respecto, por lo que la noche del sábado, ya en la Ciudad de México, los representantes de Noruega ratificaron su posición de imparcialidad en el proceso.
Dag Nylander, integrante del equipo negociador de Noruega, reiteró el papel de neutralidad del Reino de Noruega y que el proceso debe darse entre las partes venezolanas.
"Lamentamos que la reciente declaración en la ONU pueda afectar la confianza en nuestro papel. Es fundamental que este proceso de negociación sea entre los venezolanos sin ninguna interferencia indebida", señaló.
Rodríguez explicó que la aclaratoria fue hecha por solicitud del gobierno venezolano luego de las declaraciones de la saliente primera ministra de Noruega, quien dejará el gobierno tras ser derrotados los conservadores en las recientes elecciones legislativas de ese país.
El jueves, el embajador estadounidense para Venezuela, James Story, expresó el jueves pasado su apoyo al diálogo en México sobre una reforma judicial en Venezuela y dijo que el gobierno de su país estaría dispuesto a flexibilizar las sanciones económicas contra el gobierno de Nicolás Maduro, si existen “cambios” hacia la democracia.
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Aunque las negociaciones estaban previstas para el viernes, la delegación del gobierno venezolano se demoró en el marco de ambas declaraciones.
Entre los temas a tratar, está el mecanismo financiero con que tanto oposición como el gobierno de Maduro financiarán los programas de protección social para paliar los efectos de la crisis económica derivados de la pandemia de Covid-19.
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