El presidente Andrés Manuel López Obrador pidió al gobierno estadounidense que no actúen como jueces de las políticas de seguridad y combate al crimen organizado en México, pues es "de mal gusto" que funcionarios de otros países opinen sobre asuntos internos que no les corresponde".
Esto, luego de que el subsecretario adjunto de Estado para Asuntos Internacionales de Narcotráfico de Estados Unidos, Richard Glenn, calificó como “preocupante” y no prevé que avance la estrategia del gobierno mexicano.
“Si hace falta la cooperación con respecto a la soberanía de cada país [...] Lo que sí es importante, más si se trata de vecinos, es buscar la cooperación, pero no situarse como jueces y juzgar eso, desde luego, le cae muy bien a los conservadores, a nuestros adversarios”, expresó durante la conferencia mañanera.
Aunque el primer mandatario aceptó que “sí hace falta la cooperación”, consideró que los comentarios de Glenn fueron de “muy mal gusto”, porque se debe respetar la soberanía de las naciones y una política extranjera no puede dictar la agenda de otros países.
“Es hasta de mal gusto hacerlo. Imagínense que yo declare que está mal la estrategia de Estados Unidos, porque permiten sin control la venta de armas, para causar la muerte de civiles. No es eso, cada país tiene su independencia lo que sí es importante, más si se trata de vecinos es buscar la cooperación”, manifestó.
No obstante, aseguró que “una golondrina no hace verano” y se mantiene la buena relación con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien refrendó recientemente su respeto a México y agradeció su cooperación en el tema migratorio.
Este sábado, después de la detención fallida de Ovidio Guzmán López, ambos representantes de Estado sostuvieron una llamada telefónica, en la que Trump manifestó su respaldo a López Obrador y prometió no intervenir.
Asimismo acordaron avanzar en una estrategia conjunta contra el tráfico de armas, misma que fue discutida el siguiente lunes entre el canciller mexicano Marcelo Ebrard, el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo, y el embajador de E.U en México, Christopher Landau.