La designación del Fiscal General de la República y el Fiscal Anticorrupción, deberá aplazarse hasta que hayan concluido los comicios presidenciales del 2018 y el nuevo titular del Ejecutivo envíe una nueva terna “con gente honorable, limpia, abogados de prestigio, honestos; porque el principal problema de México es la corrupción y la impunidad”. De lo contrario, será muy incómodo trabajar por 10 años con un funcionario del viejo régimen, demandó AMLO.
Durante un video que difundió en sus redes sociales, señaló que este pronunciamiento no es producto de una vendeta, sino de la reflexión a la que llegó después de enterarse que en la boda del exconsejero Jurídico de la Presidencia, Humberto Castillejos, desfilaron las principales figuras de “la clase política”: el exmandatario Carlos Salinas de Gortari, el panista Diego Fernández de Cevallos y el actual presidente Enrique Peña Nieto.
“No con ánimos de venganza, no es mi fuerte la venganza; justicia, no venganza. No es posible que se mantenga este régimen de corrupción y de impunidad. Independientemente de los castigos a corruptos, a quienes han violado la ley, eso lo tenemos que resolver entre todos, desde luego con respeto al marco legal, al estado de Derecho”, aclaró el tabasqueño.
Ante esta situación, habló de lo incómodo que sería escoger en estos momentos a un fiscal por 10 años; por lo que esta tarea deberá asumirla el próximo Presidente de la República cuando designe a un nuevo gabinete honorable, limpio y con abogados de prestigio; para hacerle frente al “principal problema de México: la corrupción y la impunidad”.