Morena se perfila para tener la mayoría en 18 de los 30 congresos locales que se renovaron el pasado 6 de junio. El caso más relevante es el de Tamaulipas, en el que de confirmarse la mayoría morenista, podría darse el desafuero del gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, sobre quien pesa una orden de aprehensión que no ha sido ejercida porque sus diputados, de mayoría panista, han decidido mantener su fuero.
Sin embargo, Morena y sus aliados perdieron espacios en las legislaturas locales, pues de 21 en los que eran mayoría antes de la elección, ahora sólo conservan 19, ya que perdieron el control de los congresos del Estado de México y Morelos.
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De acuerdo con los datos del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP), al corte de las 17:00 horas de ayer, los congresos de Baja California, Baja California Sur, Campeche, Chiapas, Ciudad de México, Colima, Guerrero, Hidalgo, Nayarit, Oaxaca, Puebla, Sinaloa, Sonora, Tabasco, Tamaulipas, Tlaxcala, Veracruz y Zacatecas quedaron en manos de la Cuatroté, a los que se le suma Quintana Roo (que se renovará hasta 2022).
La alianza opositora del PAN, PRI y PRD se perfila como mayoría en cinco legislaturas: Aguascalientes, Durango, Estado de México, Michoacán y San Luis Potosí.
Acción Nacional, aliado sólo con el PRD, controlará los congresos de Chihuahua, Querétaro y Yucatán, mientras que por sí sólo, el partido albiazul se hizo de la mayoría de diputados en su bastión, Guanajuato.
Por otra parte, el PRI junto con el PRD obtuvieron más curules en Nuevo León, pero no las suficientes para controlar el Congreso, pues el PAN sería una muy cercana primera minoría. El tricolor actualmente es mayoría sólo en el Congreso de Coahuila, que fue renovado apenas el año pasado.
Movimiento Ciudadano mantiene su hegemonía en el estado de Jalisco, donde ganó 16 de los 20 distritos electorales.
Y en Morelos, aunque Morena y sus aliados ganaron más distritos, no serán suficientes para hacerse de la mayoría.
La importancia del control de los congresos locales radica en que para pasar una reforma constitucional, el Congreso de la Unión debe someterla a la aprobación de un mínimo de 17 legislaturas estatales para publicarla.
DESAFUERO
El gobernador de Tamaulipas fue señalado por la Fiscalía General de la República (FGR) por el delito de defraudación fiscal. El pasado 30 de abril, la Cámara de Diputados aprobó el desafuero del mandatario estatal con 362 votos en favor, 134 en contra y 14 abstenciones.
El artículo 11 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos señala que al tratarse de una autoridad local, el dictamen de desafuero debe comunicarse a la legislatura del estado “para que en ejercicio de sus atribuciones proceda como corresponda”, por lo que al ser notificados los diputados de Tamaulipas, en su mayoría del partido del gobernador, estos decidieron mantenerlo en su cargo.
Su decisión abrió una controversia sobre si corresponde en última instancia al Congreso local, mantener o no al gobernador.
Los diputados federales de Morena asumen que el Congreso local debió separar al gobernador de su cargo y nombrar a un interino, por lo que el tema fue llevado a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, quien determinó que es facultad de la legislatura local decidir el futuro del mandatario.
La actualización del PREP a las 10:00 horas de ayer indicaba que Morena tendría 16 de las 22 diputaciones de mayoría relativa, que sumadas a las que se le asignen por la vía plurinominal, le darían la mayoría en el Congreso y se abriría la puerta para separar a García Cabeza de Vaca del cargo antes de 2022, fecha en que termina su encargo.
Con información de Omar Rivera y editoras OEM