México tiene muchísimos problemas. Pobreza, desempleo, inseguridad, enfermedades, pobre educación, salarios bajos. Todo eso lo vi cuando gané las elecciones del 2018. Con cercanos planté: ¿Por dónde comenzamos? Y en el diagnóstico contemplé la solución. Urgía terminar con la corrupción. No exagero. El problema número 1 de México es la corrupción. Había que enfrentarla.
Tamaño desencanto me esperaba -narró el Presidente Andrés Manuel López Obrador. La corrupción que hallé era monstruosa. ¡No tenía precedente!! Un aparato enmarañado la ocultaba. Andamiaje legal minuciosamente urdido la protegía. Responsabilidad del Poder Judicial de nuestro país. Conciencia de que deben servir al pueblo. Desde hace mucho prefieren proteger a empresas extranjeras, inversionistas y grupos de interés locales, antes que al propio pueblo.
Combatir la corrupción. Sigue la limpia en Petróleos Mexicanos. Continua ese esfuerzo en la Comisión Federal de Electricidad. Ambas son empresas del pueblo. Pertenecen a los mexicanos. No persiguen negocio alguno. Empresas estatales cuya fortaleza garantiza el progreso de México. De su prosperidad -modernidad, buen manejo administrativo- depende el avance nacional.
"El neoliberalismo se impuso la tarea de extinguirlas. Impuso altos impuestos a Petróleos Mexicanos. Durante décadas el presupuesto de la nación se fincó en un cuarenta por ciento en tributos a la explotación petrolera. Y a "ordeñar" a la petrolera. Sin renovar equipos. Sin destinar dinero a la exploración del subsuelo o en aguas someras. Regímenes fueron y vinieron. En cuarenta a los neoliberales, los tecnócratas corruptos no destinaron un peso a la construcción de una refinería. Peor aún: La tecnocracia abandonó todo mantenimiento en las refinerías existentes. Oxido, humedad, polvo, mugre las derrengaron. Casi se convirtieron en chatarra. Mi gobierno busca rehabilitar las 6 que tenemos. Les gastamos 10, 000 millones de peso. Son seis. Reiniciaré los trabajos de la planta coquizadora de Tula, Hidalgo. Proseguiré en la construcción de a refinería Dos Bocas. Con la que compramos en Dallas, Texas tendremos en el 2023 los combustibles que necesitamos.
"!México es nuestro! -exclamó el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
El Presidente Andrés Manuel López Obrador realizó su habitual conferencia "mañanera" en el Salón Guillermo Prieto de Palacio Nacional en presencia del Secretario de Hacienda, Arturo Herrera, la secretaria de Energía Rocío Nahle, la Secretaria del Medio Ambiente María Luisa Albores, los directores de Petróleos Mexicanos Octavio Romero y Manuel Bartlett Díaz de la Comisión Federal de Electricidad.
Explicación de Octavio Romero. Las razones de la compra de las acciones de la Refinería Deer Park en Estados Unidos. Edad, extensión, funciones, capacidad de la planta. Conveniente ubicación. Estratégica.
Los yerros del corrupto neoliberalismo. Privilegió a inversionistas privados. Distinguió a vendedores de refinados del extranjero. Renunció a producir y explorar. Reforma Energética del sexenio anterior que permitió la entrega de concesiones a petroleras extranjeras que comprometen al 20 por ciento de la riqueza petrolera nacional. "Con el 80 por ciento restante -se ufanó López Obrador- tenemos bastante. La Reforma Energética de Peña Nieto engañó al pueblo. Ofreció que la inversión extranjera llegaría incontenible - a raudales- en nuestro país. Y que los precios de los combustibles descenderían. Nada de eso ocurrió. Gasolinazos, sí".
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Renace Petróleos Mexicanos. En el 2023 México no comprará más gasolina en el extranjero. Dará fin a décadas de dependencia energética. Asegurará el desarrollo del país. La soberanía nacional ya no estará en riesgo
"México es nuestro! -culminó López Obrador.
